"Madrid no se ha hecho pensando en los niños"

Reniega de la caridad y los orfelinatos. Como presidente de Aldeas Infantiles SOS, Juan Belda (de 58 años) construye urbanizaciones de lujo para niños abandonados. Llegó hasta el palacio de la Moncloa como "ayudante de soplete", según sus palabras, y de colaborador del presidente Suárez pasó a aldeano mayor del reino. En principio, aceptó dejar por sólo dos años su bufete de abogados y una vicepresidencia de Antena 3 Radio. Han pasado ya 14 años y continúa al frente de Aldeas Infantiles, convencido, tras un viaje revelador junto al fundador de esta organización internacional, el austríaco Helmut Gmeiner, de que una familia alternativa funciona tan bien o mejor que una familia biológica. Con 60.000 socios en España y un presupuesto anual de 1.200 millones de pesetas, la organización sustenta seis aldeas con más de 500 niños y niñas asistidos por madres voluntarias. Esta semana, Belda presentó en Madrid su última campaña, que enseñará a los niños a luchar contra el fuego.Pregunta. ¿Por qué se abandonan niños en España?

Respuesta. Aquí creemos que los niños sólo sufren en el Tercer Mundo, pero la sociedad consumista europea hace que las familias marginadas no tengan otro medio de supervivencia que explotar a su hijo o utilizar una navaja. Es más injusto que esto pase en un país con medios para solucionarlo.

P. ¿A cuántas familias afecta?

R. Es muy difícil que una estadística sobre infancia sea real, porque los niños se maltratan en la oscuridad, de forma aislada. Manejamos una cifra que se está quedando corta: medio millón de niños necesitan apoyo social.

P. ¿En qué se diferencia Aldeas Infantiles de otras organizaciones de ayuda a la infancia?

R. Muchas y muy buenas organizaciones ayudan a la infancia en España, pero ellos funcionan en pi sos aislados y nosotros en pequeñas urbanizaciones que, aparte de amor, proporcionan a los niños una ayuda técnica que continúa aún después de que se han emancipado.

P. ¿Sufren los niños en Madrid?

R. En Madrid, los niños abandonados lo son por la droga, la prostitución, a delincuencia y el alcoholismo. El maltrato, por el contrario, no está1gado a la marginalidad y hay que recordar que de un niño maltratado sale un padre maltratador.

P. ¿Está Madrid preparada para que la habiten los niños?

R. Madrid, como casi todas las ciudades, no se ha hecho pensando en los niños. Faltan áreas para jugar, hospitales infantiles y centros para niños discapacitados.

P. ¿Qué necesidades de acogida infantil tiene Madrid?

R. Desde 1987, la Comunidad de Madrid recobra la tutela automática de los niños desamparados. Se hace cargo del niño en cuanto tiene conocimiento de su situación y los manda en adopción o en acogida. Nosotros nos hemos especializado en acogida de- grupos de hermanos, porque difícilmente una familia puede hacerse cargo de seis hermanos.

P. ¿En qué se diferencia Aldeas Infantiles de la caridad tradicional?

R. Nuestra labor es de justicia social, no de caridad mal entendida. Nos critican porque hacemos urbanizaciones con casas similares a las del entorno (como la aldea de El Escorial) y que gastamos mucho en casas. Pensamos que no hay que hacer casas pobres para pobres.