El Madrileño ve su futuro muy negro
La segunda oportunidad de triunfo para El Madrileño, que se doctoró en esta plaza el pasado día 25, también pasó en blanco, por lo que al términar la corrida de ayer, el torero se mostraba desmoralizado y pesimista con respecto a su futuro. "Lo tengo muy negro", explicaba casi a media voz, "porque me tocaron cuatro toros difíciles, que: me han impedido el triunfo, y sin él, empiezo otra vez de cero".Más que pesimismo, afirmaba que lo que le invadía era el ser consciente de la realidad: "Mi situación se agrava porque no pertenezco a ninguna de las casas grandes, cuyos toreros salen con la temporada hecha, estén bien o mal en Madrid" Después añadía que ni siquiera en sitios donde triunfó de novillero en 1993, "como en Albacete y tantos otros", le incluían ahora en la feria de este año.
Con respecto a los toros de ayer, "mansos como toda la corrida", admitía que los problemas de su primero le desbordaron, "cosa lógica dada mi corta experiencia", mientras que el segundo le había permitido al menos "mostrar detalles de arte, pero que no me van a servir de nada". Concluía recordando que siempre lo tuvo muy difícil, y en la confianza de que pronto le repitan en Madrid: "Otra vez es mi única y desesperada solución".
Rafael Camino se lo había tomado con más calma: "Ya predije que era muy difícil triunfar con esta divisa, que ni aquí ni un día antes en Sevilla me ha permitido más que demostrar mi entrega total". Una entrega que admitía es nueva para él: "También lo predije, y he cumplido. Lo que es una pena es que ahora que estoy más entregado que nunca no me embistan los toros. Pero ya vendrán tiempos mejores".
