Las exportaciones se consolidan como el motor de la recuperación tras un crecimiento récord
Los exportadores españoles están logrando la mayor penetración en los mercados exteriores de su historia. En los últimos meses, las ventas al exterior se han convertido en el motor más potente de la recuperación económica. En marzo, las empresas españolas exportaron por valor de 889.000 millones de pesetas, un 36,2% más que en ese mes de 1993. En enero y febrero el crecimiento fue del 47% y el 50%, respectivamente. Con estos ritmos quedará pulverizada la cifra récord de final de 1993, cuando se alcanzó otro récord de ventas al exterior: 7,9 billones de pesetas.
El peso de las exportaciones sobre el producto interior bruto, un indicador clave para medir la evolución de la exportación, según los expertos, también al canzó su máximo histórico al final de 1993 al situarse en el 16,8% del PIB. Es la mayor tasa registrada desde que se dispone de estadísticas, en 1960. A final de 1992, ese índice era del 15,2% del PIB.Los responsables del Ministerio Comercio están convencidos de que el sector exterior será clave en la salida de la crisis, y para ello llevaron al Con sejo de Ministros el pasado mes de abril un plan de apoyo a la exportación. Consta de 65 medidas que intentan responder a las preocupaciones planteadas por las empresas y recogidas en una encuesta a casi 2.000 empresarios elaborada por Comercio.
Para Vicente Salas, catedrático de Economía de la Empresa, la mejora de la exportación está clara, pero las ventas al exterior tradicionalmente han ex perimentado un fuerte tirón cuando el mercado interno se retraía. "Habría que preguntarse en qué medida es un producto de la menor demanda interna y de las tres devaluaciones de la peseta", advierte.
El sector de bienes de equipo (el 22% de las ventas exteriores en el primer trimestre del año) es muy sensible al cambio de la peseta. "Estamos mejor que hace un año, cuando se produjo la tercera y más importante de valuación de la peseta", dice José Luis Castañeda, director de exportación de la patronal Sercobe. "Lo importante es que hasta ahora el cambio de la pe seta ha logrado aguantar el diferencial de inflación con los países de nuestro entorno, lo que nos permite ser competitivos", añade.
Pero la incipiente demanda interna y el previsible crecimiento del turismo hacen pensar que la peseta no se deva luará más y que "lo lógico", según Sercobe, es perder algo de competitividad.
Precedente del 82
El secretario general técnico del Ministerio de Comercio y Turismo, José Antonio Zamora, destaca: "La tasa de crecimiento de las exportaciones en los 12 últimos meses (hasta marzo) alcanzó el 25,5%, el mayor ritmo de crecimiento desde 1984". Sólo en el periodo 1982-1984 (justo en los años de salida de la fuerte recesión de los 70) se produjeron tasas de crecimiento anuales superiores al 29%, acompañadas también de una débil demanda interna.Pero entonces el peso de la exportación de la economía era mucho menor, en torno al 10%. Zamora insiste en el que actual movimiento, exportador se ve acompañado de "una mejora del 11,6% en la relación competitividad /precio de las exportaciones". Esto es posible por dos factores: la relación entre el nivel de precios en España frente al de sus principales socios comerciales y la caída de la peseta frente a, las divisas de los países de la OCDE.
Euforia y riesgo
En Comercio están eufóricos, aunque también reconocen que uno de los grandes fallos del empresariado español es su falta de cultura exportadora. Javier Gómez-Navarro, ministro de Comercio y Turismo, repite una y otra vez el dato que refleja una encuesta reciente efectuada por el ministerio: tan sólo 6.500 empresas españolas han logrado exportar por valor de más de 15 millones en tres años consecutivos.Además, Gómez-Navarro añade que las empresas españolas exportan a un, promedio de cuatro o cinco países, lo que demuestra la "clara aversión al riesgo de acceder a nuevos mercados". En el año 1998, 45.522 empresas realizaron alguna venta al exterior. Esta cifra se situó en las 65.160 empresas en 1992.
Las devaluaciones de la peseta en los años 1992 y 1993 han hecho que los productos españoles sean competitivos hasta el punto de que el índice de tendencia de las exportaciones con respecto a los países de la OCDE sigue mejorando.
En el periodo enero-marzo se da un crecimiento uniforme en las ventas exteriores por áreas geográficas, si bien las exportaciones a la Unión Europea crecieron por encima de la media. En cuanto a la lista de los principales clientes y proveedores de España en este trimestre, ambas listas vienen encabezadas por Francia, Alemania e ltalia, que explican por sí solos el 40% del comercio exterior español.
Como mercados en clara expansión cabe citar, según Comercio, a China (+ 136,5%), Argentina (+166,9%), Corea del Sur (+367,7%), o Países Bajos (+ 113,7%), aunque el crecimiento en este último se explica por la compra de cinco aviones de Iberia en enero pasado. Comercio destaca que Japón, un mercado de difícil acceso, engrosa ya la lista de los 15 principales clientes.
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