Tráfico de pesadilla en la víspera del puente de mayo
La conjunción de la operación salida del puente del Primero de Mayo, el paso por Madrid de los trabajadores de Santana Motor y la última jornada de paros en ferrocarriles de cercanías, convirtieron ayer el tráfico rodado en una pesadilla sin precedentes. Los atascos provocaron los mayores grados de desesperación y agobio en miles de usuarios de la M-40, que permaneció colapsada durante toda la tarde de Norte a Sur.Muchos conductores adelantaron la salida del puente para ahorrarse ulteriores complicaciones: fue inútil. A primeras horas de la tarde se registraba una circulación tan intensa en todas las salidas que el bloqueo paralizaba ya importantes tramos.
Por si faltara algo a la exasperante jornada, el vuelco de dos turismos en la M30, a la altura del puente de Ventas, colapsó también, desde el mediodía, el tercer cinturón.
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