El PP cree que desde ahora cada elección va a ser una reválida para González

José María Aznar se volcará tras el debate sobre el estado de la nación en preparar las elecciones europeas y andaluzas del 12 de junio, convencido de que ha conseguido "derribar a Felipe González del caballo", en expresión de un diputado de su grupo. La principal conclusión del PP es que la credibilidad del presidente del Gobierno, principal patrimonio político de los socialistas en los últimos años, ha quedado muy dañada tras los últimos casos de corrupción, y ahora serán el PSOE y González, y no el PP y Aznar, quienes deban afrontar cada convocatoria electoral como una reválida.El ambiente en el PP no es de euforia, pero sí de confianza en que se van quemando etapas según lo previsto. Aznar nunca pensó seriamente antes del debate en presentar una moción de censura, consciente de que, en el peor de los casos para González, cada uno de los dos grandes partidos se quedaría con sus propios votos.

A partir de ahora se abre la posibilidad de la moción de censura, como advirtió el presidente del PP al jefe del Gobierno durante su encontronazo dialéctico del martes pasado. "Pero Aznar presentará la censura", señalan fuentes del PP, "cuando él lo crea conveniente, es decir, cuando pueda perder matemáticamente y ganar con rotundidad en términos políticos".

Para el PP no ha llegado aún ese momento, porque el desgaste del Ejecutivo y del PSOE no es suficiente. La moción de censura debe servir para presentar una alternativa en, toda regla, con líder y programa, "y ese cartucho no podía quemarse ahora", explican dirigentes próximos a Aznar.

La impresión extendida en la dirección popular, no obstante, es de rotundo éxito tras el debate. Los diputados de la oposición conservadora están convencidos de que González no ha salido indemne y que desde ahora deberá enfrentarse a una prueba de credibilidad continua, mientras que para la oposición de centro-derecha, los resultados del debate equivalen a una confirmación del acierto de la línea crítica y del tono enérgico mantenidos en los últimos años.

Aznar seguirá con sus frecuentes visitas a Andalucía y a otras comunidades, en una línea ya abiertamente preelectoral. El partido ha decidido reforzar la importancia y el carácter masivo de la próxima aparición pública de su presidente, prevista para el domingo en Granada En la plaza de toros de esa ciudad andaluza, Aznar participará en la presentación de los casi dos centenares de candidatos para las autonómicas.

Fuentes del PP admiten que en los próximos meses será prioritario "explicar que no todos somos iguales, y deshacer la maniobra de confusión y amenaza que ha lanzado González al escoger la estrategia de salpicar a todo el mundo con la porquería de Filesa".

Aznar declaró anoche en Antena 3 TV que no se va a agotar la legislatura y que habrá elecciones anticipadas porque el Gobierno "es débil y está bajo sospecha". No obstante, eludió un pronóstico sobre la fecha de las nuevas generales, aunque adelantó su convencimiento de que "verán un cambio político".

Aznar lanzó un mensaje tranquilizador tras el crispado debate sobre el estado de la nación, e insistió en que "España va a salir adelante". Se declaró escéptico sobre las medidas aprobadas contra la corrupción "porque quien la ha consentido y amparado no puede luchar contra ella" y vinculó la posibilidad de "limpiar España" a un cambio de mayoría electoral.

Preguntado por Manuel Campo Vidal en el programa Tiempos Dificiles, el líder del PP explicó que no presentó una moción de censura porque no lo considera razonable a sólo 10 meses de las últimas elecciones. Aznar dijo que "desearía mucho" que su llegada al poder se produjera "pasando por las urnas".