_
_
_
_

"Lo que más temía era aburrirme", dice Preston, biógrafo de Franco

La incomodidad que produce la constatación de que una medianía como Franco se mantuviera 40 años en el poder, y en un periodo en el que España vivió su transformación más radical, es lo que ha propiciado que haya sido un inglés, Paul Preston, el autor de la biografía del dictador, hasta la fecha, según dijo anoche el historiador Santos Juliá en la presentación de Franco, caudillo de España (Grijalbo), en la Residencia de Estudiantes. Aunque "lo que más temía era aburrirme", dijo Preston al final del acto, el trabajo de investigación sobre la vida de Franco terminó por resultar apasionante. "Después de tantos años de convivencia con Franco ya no sé quién soy".Esta incomodidad ha llevado a los españoles a la negación del personaje Franco, y a explicárselo como "la culminación de un fracaso histórico" en el que Franco sería el último eslabón. Así, "Franco ha servido más para explicar el pasado que para entender el futuro", a la vez que imbuyó la mirada de los españoles de "una carga de fatalidad de la que no podemos seguir presos". Según Juliá, Franco no fue una necesidad histórica, sino el último intento de negar el dinamismo que se venía anunciando con el liberalismo del siglo XIX, incluso desde la Restauración. En definitiva, como demostraron los acontecimientos desde 1960, Franco suspendió la historia, pero no la detuvo.

Para Juan Pablo Fusi, autor igualmente de un ensayo biográfico sobre el personaje, en España falta un debate sobre la significación histórica del franquismo, similar al que se está realizando en Europa sobre Hitler y Mussolini.

Abusos

El periodista y editor Javier Pradera recordó que los. españoles de hasta 19 años no conocieron a Franco, y aquellos menores de 33 lo conocieron mal, para ayudar a explicarse algunos de los cambios electorales recientes. "No quiero insinuar que los abusos del presente deban ser excusados en el recuerdo de los del pasado, y no creo que el recuerdo del franquismo deba ser usado contra la derecha", pues ésta ha hecho pública su fe democrática, dijo. Pero, añadió, es necesario que los jóvenes conozcan los extremos de desvarío y crueldad a que puede llegar una dictadura. También advirtió contra la posibilidad de que ciertos movimientos, xenófobos y racistas, y que reivindican a otros dictadores como Mussolini y Pétain, puedan llegar a España.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_