A Michael Douglas le faltan los papeles

La estrella de Hollywood Michael Douglas tramita con urgencia papeles en Mallorca. El actor y productor representa ahora un personaje real, el suyo propio: un propietario y vecino de Valldemosa que construye un edificio sin permiso, cerca de su residencia de S'Estaca, en un enclave paradisiaco y superprotegido del litoral insular. El Ayuntamiento le incoó un expediente y la comisión del patrimonio histórico abordó ayer la paralización de las obras y la posible sanción. La nueva construcción, de 300 metros de superficie, en dos plantas, está recubierta de piedra y debe albergar el domicilio de los guardas de la enorme finca. Douglas y su esposa, Diandra Lucker, llegaron el domingo a su palacete mediterráneo de reminiscencias sicilianas, levantado a finales del XIX por el archiduque Luis Salvador de Austria. S'Estaca era el refugio y morada de su amante más preciada. Este potentado e intelectual centroeuropeo es considerado el primer ecologista de Mallorca. Douglas también ha expresado a este diario su voluntad proteccionista y se ha adherido a acciones de los defensores de la naturaleza y el medio ambiente.

Hasta el momento, las rehabilitaciones efectuadas en S'Estaca habían sido de buen gusto y respetuosas con el paisaje. Los pinos invaden ahora los bancales de tierra con muros de piedra que fueron construidos -contra la pendiente- para cultivar viñas. "Parece una perla en una concha esmeralda", escribió el archiduque en su tiempo. El hijo de Kirk Douglas y su mujer, una americana que habla español y catalán de Deià con perfección, quieren recrear el ambiente perdido de fin de siglo y atrapar la paz del sobrecogedor paisaje que les rodea. Son cerca de 1.000 millones de pesetas lo que pueden haber gastado en tres años en este empeño. Han construido una piscina, transformado los establos en dependencias domésticas, plantado vides exóticas y palmeras de Egipto y restaurado kilómetros de caminos y muros. El cineasta explicó que su contable le recuerda que el mantenimiento es muy caro.

S'Estaca y toda la costa del entorno atraen como un imán. Los escritores y pintores modernistas del continente aplaudían con emoción la caída del sol en el horizonte visible. En la mansión, situada frente al mar, a mitad de la ladera de un monte imponente, figura una lápida de mármol dedicada a la amante del archiduque. El noble rogaba a los visitantes que rezaran por ella. Sobre su novia escribió: "Las obras de los hombres le parecían imperfectas, y en ello tenía razón".

El matrimonio Douglas, abrazado y vestido informalmente, acudió el martes a la casa consistorial de Valldemosa para intentar eludir la denuncia, evitar el frenazo a la obra levantada sin licencia e impedir su hipotético derribo. Gracias al oficio del letrado Biel Feliu, el celebérrimo actor obtuvo dos meses de plazo para presentar el proyecto de la obra y la solicitud de licencia de la nueva edificación. Esta, que no es nada espectacular y está integrada relativamente en el ámbito rural, infringe varias normas urbanísticas y de protección del patrimonio y del paisaje.

El municipio de Valldemosa está comandado por las fuerzas conservadoras -el Partido Popular-, y la vicepresidenta del Gobierno balear, Rosa Estarás, es la encargada de Urbanismo. Miquel, un vecino de la localidad, comentó ayer al mediodía sobre este caso: "Me gustaría que se hubiera esmerado también el celo municipal cuando se cometieron las barbaridades levantadas en el entorno de la Cartuja y en la periferia del pueblo. Son edificios que contaminan y destrozan un núcleo urbano maravilloso. Douglas no lo hace nada mal, pero también ha de cumplir los trámites".