La inversión extranjera neta en España rondó los dos billones en 1993
España sigue siendo rentable para el capital extranjero. Según datos del Ministerio de Industria, 1993 -un año recesivo en Europa- será el cuarto con mayor volumen de inversión extranjera directa de la historia de España. Las estimaciones oficiales, que deben ser ratificadas por el Banco de España, estiman que la inversión extranjera neta -descontando las desinversiones- rondará los dos billones de pesetas en 1993, una cifra menor al récord histórico de periodo 1990-1992, pero superior a años de bonanza económica como 1988 o 1989.
El flujo global de inversión extranjera directa se mantiene sobre todo por el fuerte aumento de las inversiones bursátiles que el año pasado se dispararon gracias a las salidas a Bolsa de Repsol y Argentaria. Los datos facilitados por el Ministerio de Industria contrastan con la imagen generada por algunas multinacionales en las últimas semanas. La crisis por la que atraviesan empresas como Seat, Gillette o Suzuki-Santana, por ejemplo, en opinión del ministro de Industria, Juan Manuel Eguigaray, no reflejan la tendencia general de la, inversión extranjera en España contemplada en su globalidad. Aunque la inversión directa en empresas cayó el año pasado respecto a los 1,25 billones de pesetas de 1992, las entradas fueron considerables a través del mercado bursátil español.
Las cifras oficiales que facilita el Ministerio de Industria y Energía para sostener esa opinión indican que de esos cerca de dos billones de pesetas de inversión extranjera en España, 918.000 millones de pesetas fueron inversiones directas -es decir, a adquisiciones de empresas o ampliaciones de, capital...-, excluidos valores negociables en Bolsa e inmuebles. El resto, hasta cerca de los dos billones de pesetas, se ha invertido en el mercado bursátil, excluyendo la inversión realizada en deuda pública.
Concentración por sectores
Según los responsables del Ministerio de Industria y Energía, la inversión extranjera en valores negociables de empresas que se cotizan en la Bolsa española supuso, en 1993, un récord histórico que supera los máximos registrados entre los años 1991 y 1992. La inversión extranjera en acciones cotizadas en Bolsa superó en términos netos los 900.000 millones de pesetas, lo que supone un crecimiento de más del 150% respecto a 1992 (véase el cuadro que acompaña a esta información). Las fuentes consultadas, señalan que en esta cifra juega un papel importante la salida a Bolsa de las entidades públicas Argentaria y Repsol.
La mayoría de esa inversión, el 75%, se concentró en cuatro sectores: bancario (Banco Santander, Banco Popular, Banco Bilbao Vizcaya, Grupo Argentaria y Banco Central Hispano); energía (las eléctricas Iberdrola y ENDESA); comunicación (Telefónica) y petróleo (el grupo Repsol). Por lo que se refiere a las inversiones, -excluidos los valores negociables en Bolsa-, la gran mayoría de las operaciones se ha dirigido a la ampliación de capital de empresas ya existentes, así como a la adquisición de empresas españolas.
Entre estas últimas destacan la compra de Cementos Asland por la francesa Lafarge Coppee, la de Royal Brands por la estadounidense RJR Nabisco, Aguas de Lanjarón por el grupo francés BNS, o también una parte de la empresa Cervezas El Águila por Adotph Coors Company, entre otras operaciones inversoras.
La constitución de empresas o nuevas implantaciones supusieron el 3% de la inversión extranjera el año pasado.
Por países de origen, Holanda sigue siendo el primer inversor en España, con un 22% del total de las inversiones. Las ventajas fiscales que ofrece este país para la instalación de sociedades intermedias es una de las principales razones de que se mantenga, repetidamente como primer inversor. A Holanda le siguen, en el orden de inversiones en España, Francia (11%), EE UU (8%), Reino Unido (7,5%) y Alemania (7%).
La comunidad autónoma de Madrid (con el 47%), Cataluña (28%), Andalucía (7%), la Comunidad Valenciana (5%) y el País Vasco (3%) son las autonomías que recibieron más inversión extranjera durante el pasado año, según los datos con los que cuenta el departamento que encabeza Juan Manuel Eguiagaray.
Veriricación
Según esas mismas fuente, y por lo que se refiere a los proyectos de inversión extranjera directa presentados en el Ministerio de Economía y Hacienda para su verificación, como exige la legislación vigente, la cifra alcanza 1,8 billones de pesetas, lo que supone la tercera cifra más elevada de la historia de España. En opinión del ministerio, estos datos deshacen la imagen generada de que las multinacionales huyen de España. Una idea, en su opinión, tan convencional como la que se manejo en años anteriores de que España "estaba en venta".
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