J. P. Morgan no informó de los riesgos de Banesto hasta que éste se intervino

J. P. Morgan no informó de las dificultades de Banesto a la Reserva Federal (equivalente al banco central en EE UU) hasta después de la intervención, a pesar de que el banco de negocios asegura que conoció las dificultades de Banesto en otoño de 1993. La dirección de Morgan se ha reunido dos veces, en enero y febrero, con representantes de la Reserva Federal, que están a la espera de un informe más amplio sobre las relaciones entre el banco español y el norteamericano.

Alan Greenspan, presidente de la Reserva Federal, hace esas revelaciones en una carta de 13 folios enviada a Henry B. González, que preside el Comité de Asuntos Bancarios del Congreso, en respuesta a su petición de información sobre los lazos entre J. P. Morgan y Banesto. Greenspan añade en su carta que no hay pruebas de que J. P. Morgan o el fondo de inversiones Corsair, gestionado por J. P. Morgan, pudieran haber controlado Banesto. Desde la intervención, asegura Alan Greenspan, la Reserva Federal ha incrementado su control sobre las operaciones bancarias de entidades norteamericanas con Banesto. Aunque el Banco de España no había informado a la Reserva Federal de los crecientes problemas financieros y de liquidez de Banesto -entendiendo que las dificultades eran locales y a corto plazo, acepta el informe-, las autoridades estadounidenses creen que las decisiones tomadas en Madrid en apoyo de Banesto han "minimizado los riesgos que la intervención podría haber desencadenado".El seguimiento de la situación "revela que ahora mismo no existen graves preocupaciones en cuanto a la liquidez" de Banesto. "El Banco de España ha cooperado con nosotros, ha respondido a todas nuestras preguntas y ha actuado responsablemente al mantener informada a la comunidad regulatoria bancaria".

Henry González había preguntado a la Reserva Federal si el fondo de inversiones Corsair controlaba Banesto. En la respuesta de Alan Greenspan se describe el carácter del fondo y sus 50 socios, sin entrar en detalles porque se considera "información confidencial de negocios". En las aportaciones de capital para la inversión en Banesto se establecía que ninguno de los socios podía superar el límite de los 100 millones de dólares y después de una carta de aprobación del 5 de mayo de 1993, Corsair compró 12.855.581 acciones del banco, el 7,9% del capital. "A pesar de que la inversión de Corsair se consideraba vinculada a otra sustancial inversión adicional de Conde, entonces presidente de Banesto, no hay pruebas que indiquen que Morgan o Corsair quisieran controlar a Conde o sus acciones de tal manera que estas acciones pudieran sumarse a las de Corsair a efectos del análisis de control".

[El ministro de Economía, Pedro Solbes, y el presidente de la CNMV, Luis Carlos Croissier, comparecen hoy en la Comisión de Seguimiento de Banesto en el Congreso. Dos agrupaciones de pequeños accionistas pedirán la acción de responsabilidad contra los antiguos gestores del banco.]