Multitel invierte en cable desde hace dos años sin tener la concesión

Llevan dos años de gastos con la televisión por cable y aún no hay ley del cable. Multitel, un holding con varias empresas, trabaja en el cableado de las ciudades sin tener en la mano la concesión y sin que ni siquiera se haya presentado en el Parlamento la preceptiva ley. Jorge Planas, director general de Multitel, confía en que cuando exista el texto legal nadie mejor que ellos podrá poner en marcha esa instalación, capaz de suministrar a cada hogar 60 canales de televisión, servicio telefónico y de telecompra a cambio de unas 3.500 pesetas mensuales.El primer borrador de la ley del cable reducía la instalación a empresas públicas y el segundo dejaba la concesión en manos del Gobierno. En ambos casos, las expectativas de Multitel quedarían lesionadas. Pese a ello, Multitel sigue arriesgando.

Sobre la mesa del director general de Multitel, Jorge Planas, yace el resultado de 100 millones de pesetas: una caja de un metro de largo por un folio de alto en 'donde se resume todo lo que se debe saber sobre el futuro desarrollo de la televisión por cable en España. La alegalidad del sector no ha impedido que el holding Multitel vaya desarrollando unas pequeñas empresas.

"Nuestro objetivo", dice Planas, "es promover empresas en las principales ciudades españolas, buscar socios locales y asociarnos a ellos con una participación del l0%". Así nació Cable Europa, en la que estaban los principales bancos, Iberdrola y Multitel, que se gastaron 100, millones en las posibilidades que tenía el cable en España.

Multitel se plantea la creación de sociedades locales. La primera es Sevillana del Cable, en donde se reproduce el esquema: 10 socios, a 10 millones cada uno. Al poco de constituirse salió a subasta la licencia municipal para cablear Jerez de la Frontera. Sevillana del Cable concurrió y ganó la licencia.

Multítel ha continuado su táctica asociacionista en Santander (Santander del Cable) y en Burgos (Burgos del Cable). Pero el tiempo pasa; los gastos, aunque sólo sea en despachos, aumentan. Arrellenado en su sillón, Planas explica claramente de qué viven mientras llega la ley: "Multitel vive de GEPSA, que es una empresa del holding que tiene la exclusiva publicitaria de la cadena radiofónica COPE. Vivimos de la COPE. Lo del cable es un proyecto de futuro que de momento nos permite conocer la viabilidad y los costes de la instalación en cada ciudad. Si sabemos mejor que nadie cómo está la situación, tenemos un proyecto y estamos asociados a las fuerzas vivas de cada ciudad, lógicamente es a nosotros a quienes se tiene que conceder las licencias".Las fuerzas vivas

Así de clara es su táctica. Multitel ha sustituido los antiguos pocderes fácticos del pueblo, alcalde-maestro-médico-guardia civil, por los nuevos: alcalde-banco-periódico-eléctrica. En Santander, Multitel va asociado, entre otros, al Banco Santander, a la Caja de Cantabria, al periódico local Diario Montañés, Eléctrica del Viesgo y al Ayuntamiento.

Pero los borradores de la ley pueden echar por tierra ese plan. El primer borrador de ley, por ejemplo, puntualizaba que sólo podían cablear las empresas públicas Telefónica, Correos y Retevisión, que alquilarían sus instalaciones a quienes quisieran comercializar el servicio. Eugenio Galdón, máximo responsable de Multitel, calificó de "arbitraria" esta cláusula, pero confiaba en que "imperase la sensatez",, de no ser así, la empresa de Galdón podía darse por muerta.

En Alemania, fue la empresa telefónica nacional la que realizó en seis años el cableado de todo el país. "Pero, evidentemente, España no es Alemania ni Telefónica tiene los 700.000 millones de pesetas que costaría cablear el país", avisa Planas.

El argumento para justificar el monopolio público se plantea al considerar al cable como un sector de importancia estratégica. De hecho, tras la electricidad y el teléfono, es el tercer cable que entraría en los hogares. Planas así lo reconoce: "El cable es un cañón 1.250 veces más capaz que el telefónico".

La legislación británica siguió el ejemplo alemán, pero el monopolio no funcionó. Se rectificó la ley en el sentido de abrir el mercado a todos y la penetración en los hogares se multiplicó por tres en dos años. Algo similar ocurrió en Francia.

El segundo borrador español también eliminó el monopolio. Pero tampoco ahora los directivos de Multitel están satisfechos. Efectivamente, el nuevo borrador señala que las licencias de cableado las concederá el Ministerio de Obras Públicas. "El cable es un tema local", protesta Planas. Su empresa comulga con el proyecto del Partido Popular.