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El ex gerente de PSV dice que han amenazado de muerte a sus hijos

Francisco Peregil

El ex gerente de PSV, Carlos Sotos, afirmó ayer que ha interpuesto una denuncia por allanamiento de morada contra la junta directiva de la Asociación de Futuros Vecinos de Valdebernardo, que se manifestó el sábado ante su chalé de Madriguera (localidad segoviana de 100 habitantes). Sotos confesó que lo más grave que le ha ocurrido desde que dimitió en la cooperativa de UGT son las amenazas telefónicas contra sus hijos menores de 10 años.

"Estoy de acuerdo con lo que piden los cooperativistas", declaró Sotos, "tienen derecho a una vivienda, pero no a tirar piedras y hacer pintadas en mi casa de Segovia ni en la de Madrid, que la tengo desde hace más de siete años, o sea, que ningún cooperativista me la ha pagado. Yo he perdido en esta historia al menos tanto como las 20.000 familias cooperativistas, porque he perdido mi patrimonio, 20 años de mi vida profesional y parte de mi futuro".El ex gerente de PSV dijo que hubo un día en que llegó a recibir 87 amenazas telefónicas anónimas. "Todo ello lo presentaré ante el juez".

Asegura que dos personas con nombres y apellidos, entre otros que ampliará hoy en la querella criminal: "Santiago Portela y Tomás Arrieta han creado el caldo de cultivo, mucho antes de la crisis para generarla y exacerbarla. No sé bajo quié intereses actúan".

Santiago Portela, ante estas declaraciones, respondió: "Lo que no está claro -y lo que convendría aclarar- es a qué intereses sirve Sotos. Es dificil encontrar a alguien que haya hecho tanto daño a los sindicatos, al cooperativismo y a la vivienda social. ¿Que amenazan con querellas criminales? Bueno, penden sobre él cuatro querellas criminales por apropiación indebida y estafas, firmadas por casi 2.000 ciudadanos".

PASA A LA PÁGINA 3

Carlos Sotos: "No comprendo por qué nadie soluciona lo de PSV"

VIENE DE LA PÁGINA 1La línea de Sotos ha sido siempre la misma: promesas incumplidas y amenazas de querella a periodistas y socios cooperativistas", declaró ayer Santiago Portela. "Le he oído montones de veces amenazar con querellas. Sabe muy bien que cualquier proceso es un trastorno para el trabajador, porque tendría que perder tiempo y pagar abogados para defenderse. Sotos instrumentaliza a la justicia contra las víctimas de sus errores", añadió.

El ex gerente de PSV asegura que no comprende por qué aún le exigen responsabilidades, tras siete meses de su dimisión. "Desde hace cuatro meses hay un nuevo equipo de gestión en la cooperativa al que pedir cuentas. Yo me fui porque al sindicato se lo exigieron. Y lo hice sobre la base de que esto se resolvería de forma inmediata. No comprendo por qué nadie lo soluciona. Lo de Banesto se ha solventado en 15 días, y esto se arrastra meses y meses, no sé con qué fines".

Moción de urgencia

Mientras tanto, los cooperativistas no dejan de movilizarse. Los afectados de Alcobendas por la crisis de PSV se acercaron ayer hasta la Casa de Cultura del municipio, donde estaban reunidos los máximos dirigentes del socialismo madrileño. La protesta de dos decenas de cooperativistas fue mitigada con una promesa de solución.

La Federación Socialista Madrileña acordó por unanimidad una moción de urgencia para dar una respuesta rápida a los problemas de los socios de PSV en Alcobendas.

Diputados y concejales se comprometieron a solicitar a la Ejecutiva Federal de su partido "una urgente gestión ante el Gobierno nacional, los gobiernos de las comunidades autónomas y los ayuntamientos donde el PSOE está representado para que a la mayor brevedad se pongan todos los medios para dar inmediatamente seguridad inequívoca a los cooperativistas de PSV de que tendrán su casa o su dinero".

La manifestación de Alcobendas no fue la única contra PSV. Unos trescientos cooperativistas de la promoción del Espinillo cortaron ayer la autovía de Andalucía (N-IV) durante media hora, a la altura del kilómetro 7. La protesta ocasionó una caravana de vehículos de cuatro kilómetros.

"Lo peor de todo", reconoció Tomás Arrieta, cooperativista de Valdebernardo e interventor de PSV, "es que el movimiento se está degradando. Unos cortan carreteras, otros se van al chalé de Sotos como si fuera una excursión... y cualquier día puede pasar algo. Es cierto que hay gente muy exaltada y posiblemente sea verdad que le han amenazado a los niños".

Los cooperativistas de PSV han aprovechado la moda del lazo para simbolizar el anhelo de conseguir las viviendas. Desde ayer, todos lucen un lacito verde como emblema de sus desgracias y sus sueños, informa Luis Fernando Durán.

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Sobre la firma

Francisco Peregil
Redactor de la sección Internacional. Comenzó en El País en 1989 y ha desempeñado coberturas en países como Venezuela, Haití, Libia, Irak y Afganistán. Ha sido corresponsal en Buenos Aires para Sudamérica y corresponsal para el Magreb. Es autor de las novelas 'Era tan bella', –mención especial del jurado del Premio Nadal en 2000– y 'Manuela'.

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