_
_
_
_
LA HUELGA DEL 27-E

Los frutos del 14-D

La huelga del 14 de diciembre de 1988, celebrada en un momento de despegue económico sin precedentes, paralizó el país. UGT y CC OO la convocaron para forzar al Gobierno a retirar el que se denominó Plan de Empleo Juvenil y a negociar la que bautizaron como Plataforma Sindical Prioritaria.El éxito de la protesta, que sorprendió incluso a los convocantes, obligó a ceder al Gobierno. En el cesto sindical, tras un largo tira y afloja con el Ejecutivo, cayeron frutos jugosos. Las pensiones se incrementaron significativamente: entre el 7% y el 38,32%, según los casos; jubilados y funcionarios lograron, además, una cláusula de revisión, por si los precios se incrementaban por encima de las previsiones.

Más información
¿Y ahora, qué?
Las razones de los sindicatos
Cooperativistas de PSV increpan a UGT y a Redondo ante el Congreso

Para los funcionarios, el 14-D significó también el logro de una antigua aspiración, la negociación colectiva, amén de un incremento de su masa salarial del 2,55% en concepto de pago de la deuda social contraída con el colectivo por desvíos pasados. Mejoraron también las prestaciones no contributivas y las ayudas familiares, para las rentas inferiores a un millón de pesetas. En dinero, los logros se cuantificaron en enero del 90 -pendiente la subida para funcionarios y otros flecos- en cerca de 400.000 millones.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_