Los Globos de Oro ponen a Steven Spielberg a las puertas de conseguir el Oscar

Si los Globos de Oro, prestigiosos premios de cine y televisión otorgados desde hace 51 años por la Asociación de Prensa Extranjera de Hollywood (APEH), funcionan este año como suelen hacerlo, es decir, como premonición de los Oscar, Steven Spielberg puede obtener el próximo mes de marzo su ansiada primera estatuilla. La APEH le votó el sábado en Beverly Hills (California) como mejor director del año, y su La lista de Schindler obtuvo el Globo de Oro a la mejor película dramática (Mrs. Doubtfire resultó la mejor comedia). Se concedieron globos especiales al actor y director Robert Redford, por el conjunto de su carrera, y a todo el reparto de Short Cuts, de Robert Altman.

La película El piano, la otra gran contendiente de esta edición y una de las sorpresas cinematográficas de la temporada, tuvo que conformarse con el Globo de Oro a la mejor actriz protagonista, Holly Hunter.La lista de Schindler fue además premiada por el guión de Stephen Zaillian (basado en la novela de Thomas Keneally a cerca de un empresario alemán que salvó a 1.200 judíos del holocausto nazi). Spielberg dijo al recoger el premio a la mejor dirección: "Esta película ha sido la experiencia de mi vida como director. Lo malo es que no sé qué voy a hacer ahora".

[El cazanazis Simon Wiesenthal, en cuyo centro de Los Ángeles obtuvo el cineasta material necesario para, filmar una historia verídica, elogió en Viena la película diciendo que se la había puesto "la piel de gallina", según Efe. En declaraciones al diario Kurier, Wiesenthal, de 85 años, que ha contribuido a la captura de más de mil criminales nazis, confirmó que conocía personalmente al empresario nacionalsocialista Oskar Schindler, que salvó la vida a 1.200 judíos, tras un proceso personal de purificación moral, ya que era al principio un nazi convencido].

El protagonista de la noche fue sin embargo el terremoto de la semana pasada en Los Ángeles. Los productores de la gala utilizaron hasta tres cadenas para sujetar cada foco de televisión al techo del salón de baile del hotel Beverly Hilton, donde el viernes se sintieron leves temblores durante los ensayos.

Pero los únicos temblores que hubo el sábado fueron los de los seleccionados segundos antes de anunciarse cada ganador (se recuperó el clásico and the winner ¡s ... ). Los Globos de Oro dividen sus categorías en comedia y drama, y tradicionalmente la Academia de Hollywood se toma muy en serio a los ganadores de los apartados dramáticos a la hora de otorgar los oscars.

La APEH votó a Tom Hanks como mejor actor en un papel dramático por su interpretación de un abogado con sida en Philadelphia, de Jonathan Demme. La sobrecogedora canción de Bruce Springsten que abre este filme fue elegida mejor tema musical del año escrito para una película. El Globo de Oro a la mejor película extranjera recayó en la producción china Adiós a mi concubina, que competía con películas como la aclamada Azul o El banquete de boda.

En el apartado de comedias o musicales, el premio fue a parar a Mrs. Doubtfire. Su protagonista, Robin Williams fue elegido mejor actor de comedia del año. El Globo de Oro a la mejor actriz de comedia fue para Angela Bassett, que interpreta a la cantante Tina Turner en el musical What`s love got to do with ¡t.

Winona Ryder recibió el premio a la mejor actriz de reparto por su papel en La edad de la inocencia, de Martin Scorsese, y Tommy Lee Jones (El fugitivo) fue elegido el mejor actor secundario del año. Los premios de televisión recayeron fundamentalmente en una telécomedia, Seinseld (tres galardones), y en un drama, NYDD Blue (dos galardones), que son ahora mismo las series más revolucionarias e innovadoras en la televisión norteamericana.

Los Globos de Oro se han convertido con los años en una gala más austera, dinámica y festiva que los oscars, cuyos galardones se conceden el próximo 21 de marzo. Su prestigio se basa en que reflejan las opiniones y gustos de críticos de todo el mundo, y este año han atraído una covertura periodística sin precedentes: 750 periodistas y cámaras de televisión asistieron a un acto que el veterano actor Ed Asner describió como "una salvaje fiesta babilónica". Entre los asistentes estaban Gregory Peck, Al Pacino, Charlton Heston, Andy García y Michelle Pfeiffer.