El Rey llama a los nacionalistas a superar la desunión en España

El Rey volvió a insistir ayer en su mensaje a los nacionalistas para construir la España del futuro. Aunque sin citarlos, el jefe del Estado aprovechó su discurso durante la Pascua Militar para proponer que la diversidad regional busque más la unión que la separación. "Estamos construyendo España mejor, lo que nos obliga a superar las tradicionales desuniones que, en ocasiones, han malogrado etapas de nuestra historia", proclamó el Rey.

Carlos en ese terreno ya ha sido puesta de manifiesto en otras de sus intervenciones a lo largo de esta y de la anterior legislatura. En esta ocasión, el mensaje del Rey se produce pocas semanas después de que algunos dirigentes vascos, como Xabier Arzalluz e Iñaki Anasagasti, manifestaran que el Ejército es el factor que impide el ejercicio del derecho a la autodeterminación.Sin responder explícitamente a esos comentarios, el Rey señaló: "La diversidad que nos enriquece debe unirnos en lugar de separarnos, y servir de estímulo a nuestra convivencia, que ha sido cimentada, durante siglos por el trabajo de generaciones que han hecho de España la tierra de nuestros padres y la tierra de nuestros h¡jos". Y agregó: "He venido repitiendo en otras celebraciones como la de hoy la necesidad de que exista una perfecta integración de los militares en la vida del país y que todos los ciudadanos se sientan orgullosos de sus ejércitos".

En la tradicional festividad militar, el Rey se congratuló de la adaptación del Ejército, con un presupuesto austero, a una etapa de crisis. "También agradece [el Rey] que, como Fuerzas Armadas, penséis ante todo en las. necesidades de la sociedad, y después en las que son vuestras".

Ayer, sin embargo, varios capitanes generales aprovecharon sus discursos de la Pascua Militar en sus regiones para quejarse de los recortes presupuestarios que sufren los ejércitos y que limitan su capacidad operativa. "La crisis está limitando al Ejército español", indicó, por ejemplo, el capitán general de Levante, Agustín Gómez Quesada.

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