Un vendaval deja sin luz a 15.000 familias
La caída de un árbol sobre un cable de alta tensión dejó ayer sin luz durante dos horas a 16.000 familias que residen en los municipios de la zona noroeste de la Comunidad. El fuerte temporal de viento provocó que el tronco se precipitara sobre las líneas de Iberdrola, según informa la agencia Efe. El accidente privó de suministro eléctrico, desde las dos a las cuatro de la tarde, a 13 localidades. Villalba, Guadarrama, Las Rozas, El Escorial, Cercedilla, Los Molinos, Robledo de Chavela, Santa María de la Alameda, Colmenar del Arroyo, Fresnedillas y Zarzalejo fueron los municipios afectados por la avería, según un comunicado de la compañía Iberdrola.
Viviendas unifamiliares
El vendaval también ocasionó varios percances en Alcalá de Henares y Aranjuez. En Alpedrete, el viento huracanado hizo volar por los aires centenares de tejas de las viviendas unifamillares de esa zona de la sierra. En la carretera M-600, el aire levantó varias placas de una gasolinera ubicada entre Valdemorillo y El Escorial. En algún caso, personal de los diferentes municipios participó en los trabajos de reposición de los daños materiales. En Madrid, los bomberos tuvieron que sanear varias fachadas que podían desprenderse a causa del fuerte viento. En la calle de Galileo, una unidad trabajó durante casi tres horas para apuntalar la fachada del inmueble número 86. Para facilitar el trabajo, la Policía Municipal cortó las calles de Joaquín María López y Galileo a lo largo de toda la tarde.
A las dos de la tarde, los bomberos acudieron a levantar un semáforo que el temporal arrancó en la localidad de Guadarrama. En Buitrago de Lozoya, el vendaval arrancó de un tejado una antena de televisión de siete metros de alto. Ninguna persona resultó herida en todos estos incidentes, ocurridos a lo largo de la jornada de ayer.
Duante todo el día los bomberos realizaron más de 50 salidas urgentes para apuntalar cornisas, balcones, placas, carteles y techos. El viento, que sopló a una velocidad próxima a los 50 kilómetros por hora, mantuvo en vilo a los parques de bomberos de toda la Comunidad de Madrid.
En la localidad de Tres Cantos, varias placas solares volaron tras ser desprendidas de los tejados por el fuerte viento.
