Helmuth Rilling: "Bach fue un innovador absoluto"

El director y pedagogo alemán Helmuth Rilling (Stuttgart, 1933) lleva 40 años enseñando y dirigiendo por todo el mundo la música de Juan Sebastián Bach, a quien considera un innovador absoluto de la historia de la música. Pero la etiqueta de especialista en Bach no basta para definir a un intérprete que ha grabado más de 400 discos, dirigiendo desde el barroco a la música del siglo XX.

Rilling, al frente del coro Gáchinger Kantorei Stuttgart y la Orquesta Sinfónica de Sevilla, ha dirigido el oratorio El Mesías, de Haendel, en Sevilla y Santiago de Compostela; mañana lo presentará en Barcelona y el martes en Madrid.En 1954, cuando todavía era un estudiante, Helmuth Rilling fundó, con un grupo de amigos, el Gáchinger Kantorei. El coro es hoy uno de los más prestigiosos y activos de Alemania. Con esta formación y el Bach Collegium Stuttgart, orquesta que fundó en 1965, Rilling ha grabado toda la música sacra de Bach, un gigantesco ciclo iniciado en 1970. y finalizado en 1985, año, del 3001 aniversario del nacimiento del compositor. "Es normal que el público me considere un especialista en Bach, y lo acepto con orgullo, siempre que no signifique una limitación", afirma Rilling.

Este intérprete, que procede de una familia de músicos y de teólogos y filósofos, ha cultivado todos los repertorios, dirigiendo asiduamente las obras maestras de Haydn, Mozart, Beethoven o Brahms, de clásicos del siglo XX, como Debussy y Stravinski, y de compositores actuales como Krystoff Penderecki. "La figura de Bach debe entenderse como la del auténtico maestro. Su música es un gran compendio de todo lo que se había compuesto antes y de lo que se hará después. Fue un innovador absoluto y no creo que exista un Penderecki cuya obra no esté influenciada por Bach", explica.

Para Rilling, que confiesa sentir una especial predilección por el Requiem alemán de Brahms, la corriente de interpretación con criterios historicistas e instrumentos originales, impulsada por músicos como Gustav Leonhardt y Nikolaus Harnoncourt, es un logro incuestionable que ha puesto fin a los excesos de directores que aplicaban una visión romántica a la música barroca.

Pero también advierte que las posturas radicales son temerarias. "Aunque directores como Georg Solti o Kurt Masur sigan proponiendo lecturas románticas, la mayoría utiliza para el barroco coros y orquestas más reducidos, que es lo ideal. Otra cosa es la utilización de instrumentos originales", explica Rilling. "Las posturas radicales que defienden esa opción como la única verdadera son peligrosas. Lo importante es recrear y acercar el sentido auténtico de las obras al público de nuestros días. Y eso puede hacerse también con instrumentos modernos, o combinando antiguos y modernos".