Las compensaciones agrícolas costarán medio billón a la UE, según Francia

El compromiso agrícola entre Estados Unidos y la Unión Europea, que ha dado el impulso final a la Ronda Uruguay, costará 3.000 millones de ecus (medio billón de pesetas) en compensaciones a los afectados, según una primera evaluación del Gobierno francés. El reparto de las ayudas y las dificultades para mantener los límites de gasto del presupuesto comunitario prometen nuevos enfrentamientos entre los Doce, al igual que sucede en la cuestión de los audiovisuales que son para los europeos el fleco más simbólico de la negociación comercial con EE UU.

La Unión Europea deberá pagar la factura de una negociación que ha dejado algunos heridos por el camino: más abandono de tierras, recortes en las exportaciones agrarias, perjuicios en los productos mediterráneos o en sectores como el textil portugués. La reforma de las Organizaciones Comunes de Mercado (OCM) del vino, el azúcar, el arroz y las frutas y verduras que ha obtenido España, gravará también el presupuesto comunitario.El país que más pide y más puede obtener es Francia, que presentó el miércoles un memorándum con sus reivindicaciones. La limpieza de la mesa de negociación ha hecho aparecer peticiones de compensaciones de numerosos países, por lo que los servicios de la Comisión temen que la factura pueda ampliarse todavía más en los próximos días.

El problema es que muy fácilmente pueden quedar superados los límites de gasto inscritos en las perspectivas financieras de la UE hasta 1999, para cuyo caso algunos Estados sugieren que sean cada uno de los Doce los que paguen de sus presupuestos nacionales las cantidades en ayudas que desbordan el presupuesto comunitario. Alemania, como primer contribuyente a la UE, es también el más interesado en que las ayudas agrícolas corran a cargo de cada país, pero para miembros como España o Italia, con escasos fondos presupuestarios, significaría una catástrofe.

Los ministros de Asuntos Exteriores de los Doce se reunirán el lunes que viene para hablar de las compensaciones agrícolas que demanda Francia y del GATT. En esta reunión, los ministros escucharán las conclusiones de un informe elaborado por el comisario europeo de Comercio Exterior, Leon Brittan.

El presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors, quiso ayer quitar hierro al posible desequilibrio que podrían causar en las Finanzas comunitarias las compensaciones que exigiría el acuerdo del GATT. Defors dijo ayer en Bruselas, poco antes de viajar a París para entrevistarse con el primer ministro Édouard Balladur, que es posible atender las reivindicaciones de Francia en la cuestión agrícola de la Ronda Uruguay sin que ello suponga un desajuste en el presupuesto comunitario.

Francia quiere por todos los medios obtener un compromiso en la cumbre comunitaria de hoy que le garantice que sus agricultores serán compensados por las pérdidas que ocasione el acuerdo.

Ya en París y tras reunirse con Édouard Balladur, Jacques Delors declaró que las conversaciones entre Estados Unidos y la Unión Europea van por el buen camino. "Pero debemos mantener la guardia hasta el final", añadió. Delors dijo que el acuerdo es favorable para Europa en un 70%, pero que hasta que no se consiga el 100% no se dará el visto bueno.

En España, la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) y la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) enviaron ayer sendas cartas al presidente del Gobierno, Felipe González, para que defienda mejor los intereses agrícolas de España en el GATT ante la amenaza que se cierne sobre la agricultura española, informa Servimedia.