El resentimiento racial motivó la matanza del miércoles en un tren de Nueva York

La matanza en un tren de pasajeros ocurrida en la noche del miércoles en Nueva York, en la que un hombre negro mató a 5 personas e hirió a otras 18, tuvo motivaciones raciales, según aseguró ayer un portavoz del Gobiemo estadounidense.El tren había salido de Penn Station cargado de oficinistas agotados tras una larga jornada de trabajo en Manhattan. Era, tal como lo describen los testigos, el ambiente normal de un trayecto más de uno de esos trenes de cercanías que traen y llevan a la población de Nueva York. De repente, sin que nada ocurriera, sin que nadie profiriera siquiera un grito, un hombre de 35 años de raza negra sacó una pistola semiautomática de nueve milímitros y disparó contra la primera persona que encontró, después contra otra, y otra. Hasta dos veces cambió de vagón sin dejar de disparar. Alcanzó a 23 pasajeros, todos blancos y asiáticos, los fatalmente escogidos entre decenas de personas que gritaban, corrían y se escondían tratando de huir de un loco que, así, de una manera tan cruel, quiso exponer su solución particular a los problemas de racismo en Estados Unidos. Cinco de los atacados murieron en el acto, los otros 18 quedaron heridos, algunos muy gravemente.

El presunto criminal, de nombre Colin Ferguson, declaró después a la policía que había decidido tomarse la justicia por su mano porque odiaba a los blancos, a los chinos y a los negros que se comportaban como blancos. Odiaba al gobernador de Nueva York, Mario Cuomo, a la policía, al Gobierno, a los líderes de los derechos civiles, a la humanidad. Al único que no odiaba era al todavía alcalde de la ciudad, David Dinkins, de raza negra, y por eso, para no crearle problemas a Dinkins, había decidido perpetrar el crimen fuera de Nueva York pero contra gente de Nueva York. Ferguson, nacido en Jamaica, había escrito todo esto en una nota de cuatro páginas que se había molestado en redactar antes de cumplir con su terrorífica misión. Dinkins fue derrotado el mes pasado por un blanco republicano en las elecciones por la alcaldía.