Usos y abusos

"El sida se ha convertido en un tema estrella, en la enfermedad de moda. Se está llegando a una situación en la que empieza a haber más gente viviendo del sida que muriendo de SIDA". Así de contundente manifestó Blas Momprade, del Comité Ciudadano Antisida de Madrid, su rechazo a cualquier práctica o actividad que utilice el reclamo de la enfermedad, en una conferencia pronunciada ayer en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. Los ejemplos que puso Momprade inculpan tanto a políticos como a medios de comunicación, publicitarios y a ciudadanos privados.Hasta el comité llegó una oferta de una empresa para hacer Pins metálicos con el lazo rojo de la solidaridad que desde esta asociación elaboraban los propios seropositivos con tela. Otra compañía de investigación de mercados les ofreció un estudio sobre el sida al módico precio de 200.000 pesetas. Algo más si era para divulgar.

Finalmente Blas Momprade expresó sus reservas "ante ciertos eventos que tienen como excusa una causa benéfica, y en el fondo lo que está haciendo es dar trabajo a todos los que participan en la promoción, producción y ejecución de tales eventos". Y denuncia públicamente que el pasado viernes 5 de noviembre "tuvo lugar un concierto gigante en Barcelona bajo el título de Luchemos juntos contra el sida.

Las entradas a 2.000 pesetas, con la asistencia de 15.000 jóvenes. Los gastos igual que los ingresos, los beneficios del sida para las organizaciones destinatarias, cero". Sin embargo, Momprade anunció ayer su desacuerdo con el cese de Artundo porque, a su juicio, no está claro si hubo irregularidades en su actuación.

La Sociedad Española para la Investigación de las Enfermedades de Transmisión Sexual también quiere alertar contra "los que viven del sida, que son ejércitos de habladores, prometedores, con grandes ideas, autoproclamados investigadores para hacer Fundaciones, Sociedades, Planes nacionales, regionales, locales... específicos del sida".