El Gobierno acepta el pulso sindical y hará la reforma laboral por decretoley

El Gobierno, pese a las movilizaciones sindicales del jueves, asumió ayer la ruptura del diálogo social y ha optado por hacer la reforma del mercado laboral en solitario. Las medidas que no exijan la reforma del Estatuto de los Trabajadores se pondrán en práctica por un decreto-ley, que el Gobierno quiere aprobar el próximo viernes. Ni Trabajo ni los sindicatos quisieron reconocer ayer formalmente la ruptura del pacto social, incluso después de anunciarse la decisión final del Gobierno. Las direcciones de UGT y Comisiones Obreras tienen previsto fijar en los próximos días la fecha para una huelga general de 24 horas.

El ministro de la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, reconoció tras el Consejo de Ministros que "las cosas no van bien" y retó a los sindicatos a que presenten una propuesta alternativa a su proyecto de reforma antes del próximo martes. Unas horas antes de la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros, el secretario general de Empleo, Marcos Peña, había manifestado que el Gobierno aprobará en su próxima reunión, el 3 de diciembre, la reforma del mercado laboral.El encuentro que mantuvieron ayer los responsables de Trabajo y los sindicatos se celebró en contacto telefónico con el Consejo de Ministros. Nada máscomenzar, UGT y CC 00 pidieron al secretario general de Empleo, Marcos Peña, que plantease al Gobierno estas preguntas: ¿reconsidera sus medidas y abre un proceso real de negociación?; ¿elimina el plazo tope de discusión del 30 de noviembre y el día 3 para la aprobación de las medidas?; ¿renuncia al procedimiento del decreto-ley? La respuesta procedente de Moncloa en los tres casos fue no.

El Ejecutivo mantiene sin cambios su proyecto de reforma laboral. Por decreto-ley pondrá en marcha la creación de la figura del aprendiz y la reforma de la contratación temporal, que entrarán en vigor de inmediato. Elresto de medidas se recoge en un anteproyecto de ley que reforma el, Estatuto de los Trabajadores.

Por otra parte, el príncipe de Asturias, don Felipe de Borbón, instó ayer a la sociedad española a aunar esfuerzos para combatir la crisis económica e hizo un llamamiento a la solidaridad "paraatenuar las lesiones que causa el paro, origen de calamidades y marginación de muchas personas". Don Felipe hizo esta declaración durante la entrega a la comunidad vecinal de Grandas de Salime del Premio al Pueblo Ejemplar de Asturias 1993.

Páginas 15 y 41