Yeltsin amenaza a los partidos con quitarles la televisión si critican su proyecto constitucional

El presidente de Rusia, Borís Yeltsin, reprendió ayer a los líderes de los 13 grupos que participan en las elecciones del 12 de diciembre por insultarse entre ellos y les advirtió que, si no se limitan a exponer su programa, se van a quedar sin espacios gratuitos de televisión, especialmente si atacan su proyecto de Constitución. Al mismo tiempo, Yeltsin les anunció que la sede de la Duma estatal (Cámara baja) será un edifIcio 10 veces más pequeño que la Casa Blanca, la sede M anterior Parlamento, dejando así claro el escaso reheve que el presidente va a conceder al poder legislativo.

El presidente se dirigió a los dirigentes políticos en un tono paternalista: "Entre 700 y 800 observadores internacionales [siete de ellos serán diputados españoles] estarán entre nosotros y sería conveniente que el tono de la campaña se correspondiera con los niveles de la cultura rusa", les dijo antes de recriminarles que, en ocasiones, hayan llegado "al borde del insulto". A continuación les ordenó lo que tenían que hacer: "Para que no vuelvan a repetirse los insultos y la campaña se desarrolle con normalidad, cada uno ha de hablar por su partido y defender su programa".La amenaza de retirar la publicidad televisiva la relacionó Yeltsin directamente a los ataques a su proyecto de Constitución, marcadamente presidencialista. "Debo advertir" señaló, "que el tiempo gratuito no se da para eso y se lo vamos a quitar a quien se salga del tema, que es defender su programa".

Asalto al Parlamento

Las agencias rusas que difundieron la intervención presidencial no aludieron al enfado de Yeltsin por las negativas alusiones al bombardeo de la Casa Blanca hechas por varios partidos centristas en sus programas gratuitos, principal motivo de la convocatoria de ayer, según apuntó un portavoz presidencial.Yeltsin anunció las nuevas sedes parlamentarias, fruto de una búsqueda de varias semanas entre edificios a cual más impropio. Desde el primer momento quedó claro que las dos nuevas cámaras no iban a instalarse en la bombardeada Casa Blanca, que se cedió al Gobierno. Este edificio está siendo rehabilitado a toda velocidad de los destrozos sufridos el 4 de octubre por varios miles de obreros, reclutados según la vieja tradición soviética de cuotas por territorios.Finalmente la sede elegida para la Duma estatal ha sido el edificio del desaparecido CAME (mercado común de los paises del bloque socialista), unas 10 veces más pequeño que la Casa Blanca. Tiene la virtud de estar al lado mismo del viejo Parlamento, lo que pondrá fisicamente de manifiesto la preeminencia del Ejecutivo sobre el Legislativo.

En algún momento se estudió incluso la posibilidad de enviar la sede de la Duma a más de 20 kilómetros del centro de la capital, al edificio del actual Instituto de Dirección.

El Consejo Federal (cámara alta) se instalará en la actual Casa de la Prensa Rusa, a pesar de que, cuando la noticia era sólo rumor, 35 altos cargos de diarios le enviaron una carta a Yeltsin diciendo que ese "peligroso paso" podría "alejar" de él a los periodistas.