Mayor Zaragoza centra su nueva etapa en la Unesco en lograr la paz

Federico Mayor Zaragoza, reelegido como director general de la Unesco para un nuevo mandato de seis años, declaró ayer en París que los tres ejes que seguirá la organización son "la lucha contra la pobreza, la prevención de la violencia y la construcción de la paz a través del fomento de la solidaridad moral e intelectual".El pasado sábado, la candidatura de Mayor Zaragoza mereció 168 votos favorables y sólo tres en contra. Ayer, en el transcurso de una conferencia de prensa previa a la toma de posesión, Mayor recordó: "La Unesco dispone de 28 a 30 millones de dólares para sus iniciativas de fomento de la paz, mientras que la ONU tiene que gastarse entre 1.500 y 1.600 millones de dólares tan sólo en mantener las fuerzas de pacificación en Camboya. Nuestra organización ha sido criticada por su burocracia, pero lo cierto es que la Unesco supone el tercio de personal que un portaaviones en marcha".

Y concluyó: "Estamos mucho mejor preparados para hacer la guerra que para construir la paz. Disponemos de tanques, pero nos faltan bibliotecas o maestros".

En respuesta a algunas de las acusaciones formuladas por EE UU y Reino Unido, y que sirvieron para justificar la retirada de estos dos países de la organización, el director general explicó que había logrado que disminuyese el número de funcionarios en la sede de París -de unos 3.000 a 1.800- y aumentasen los destinados a diversos países.

Vuelta de EE UU

Federico Mayor se escudó en el pragmatismo de hombre de ciencia para hablar con prudencia del varias veces prometido reingreso de EE UU y Reino Unido: "Como científico, no puedo confirmar el retorno hasta que haya tenido lugar. Pero me consta que los motivos por los que los dos países abandonaron la Unesco ya no existen y que ahora la transparencia en la organización y administración es total".

En su discurso ante la Conferencia General, advirtió sobre el hecho de que "estamos admitiendo lo inadmisible; estamos armándonos contra enemigos que han dejado de existir".

En ese sentido, señaló que confiaba en que pronto "cambie la composición y el mandato del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas". Para Federico Mayor Zaragoza, "sólo una voluntad de entrega desmesurada permitirá los cambios y las transformaciones sociales que son ineludibles, si se quiere desactivar la bomba de relojería sobre la que estamos sentados y que utiliza como explosivos, la miseria, la desigualdad, la explosión demográfica y la migración forzosa".