Cambiar de casa a los 50

Las consecuencias de la movilidad geográfica no son fáciles de asimilar a los 50 años. En Valeo compañía del sector auxiliar del automóvil, 43 trabajadores sometidos a un expediente de movilidad afrontan el traslado desde las instalaciones de Barcelona a Martos, en Jaén, para garantizar el futuro de la empresa.La mayoría de estos empleados, que se acercan a los 50 años, no han podido afrontar el cambio geográfico y deberán acogerse a un plan de jubilaciones anticipadas y a indemnizaciones que ha previsto la compañía. Los afectados esperan que el Departamento de Trabajo de la Generalitat anule el traslado impuesto por la empresa. De momento, el 8 de noviembre deberán empezar a trabajar en la factoría de Jaén.

Los 43 afectados se niegan a marcharse y acusan a la empresa de aplicar un expediente de regulación encubierto a través del plan de movilidad. "Los que van a ir a Martos se están sustituyendo por subcontratados de forma temporal en Barcelona", afirma un miembro del comité de empresa. Y añade: "Lo que sucede es que la mayoría son trabajadores que tienen más de 50 años o aceptan indemnizaciones o se jubilan, porque afrontar el cambio es un drama familiar y social para ellos", señala el mismo miembro del comité.

La empresa ha propuesto el traslado con una compensación de tres millones de pesetas y el coste del transporte de los muebles de cada familia. El grupo francés Valeo se instaló hace 25 años en España. Ocupa a 600 personas en Martos y 115 en Barcelona, tiene otras 10 factorías de componentes del automóvil faros, embragues y aire acondicionado- y factura anualmente 13.000 millones de pesetas.

Orencio Catebilia es uno de los 15 trabaja dores de la factoría de Barcelona que se trasladarán finalmente a las instalaciones de Valeo en Jaén. "No me ha quedado más remedio que irme porque no llego a los 53 años para jubilarme de forma anticipada", señala. Catebilia explica que la empresa no ha actuado de buena fe: "Han buscado a personas con problemas familiares, de edad avanzada, para que no se trasladen a Martos con niños pequeños o jóvenes".

La empresa afrontó el pasado año una reestructuración para garantizar su viabilidad, que suponía reducir la plantilla hasta 115 trabajadores. El director general, Félix Casellas, cree que la situación es clara. "Hemos propuesto a un grupo de personas de más de 45 años que se trasladen. Lo que no podemos pagar son 30 millones por indemnización". Y añade: "La verdad es que creen que actuamos de mala fe, pero si no vienen tendremos que contratar a otros".