Titular engañoso
Cada día más personas en todo el mundo manifiestan su rechazo a que en nombre de la justicia se quite la vida a alguien, por muy salvaje y repugnante que sea el delito que haya cometido. Pero la pena de muerte aún subsiste en la legislación de muchos países. A quienes propugnan su abolición habrá causado más que asombro -si lo han leído- el titular de una breve noticia, procedente de Cuba, publicada el pasado día 15 en la sección de Internacional: Ladrón de bicicletas condenado a muerte. El lector que sólo se haya detenido en ese encabezamiento, por muy partidario que pudiera ser de la pena capital, es de suponer que -salvo aberraciones aún superiores- se habrá escandalizado. Leída entera la información, resultaba que la causa de tan tremendo castigo no era el robo de bicicletas, como se desprendía claramente de la frase.Esta titulación ha motivado quejas de varios lectores, que pueden resumirse en la formulada por Jesús María Giménez Alvira: "Bajo el titular Ladrón de bicicletas condenado a muerte se entiende que la causa de la condena es el robo de bicicletas, cuando leyendo con detalle el desarrollo de la noticia resulta que el tribunal que juzgó al interesado le consideré culpable de un asesinato, independientemente de que pudiera robar bicicletas, tomar café o fumar en pipa". Dice también que "resulta gravemente engañoso y que, por venir referido a un hecho procedente de Cuba", lamenta sospechar que "el engaño no está exento de cierta intención". Y pregunta: "¿Se habría titulado igual si los hechos hubieran tenido lugar en sus admirados Estados Unidos?".
El autor del titular, Alfonso Armada, responde: "Pese a lo que dice el firmante de la carta de que hubiera cierta intención además de engaño, niego tal voluntad e intención. Habría titulado igual si los hechos hubieran tenido lugar en Estados Unidos". Y explica: "Me dejé llevar por lo llamativo de que el condenado a muerte por asesinato fuera, además, ladrón de bicicletas. Admito que se trata de un titular equívoco y que llama a engaño, es decir, desafortunado, ya que el individuo fue condenado a muerte por asesinato". Aun admitiendo esto, agrega: "Sin embargo, no deja de ser cierto que el condenado era un ladrón de bicicletas". Sí, concretamente la noticia decía "cabecilla de una pandilla que se dedicaba al robo de bicicletas"; pero es manifiesto que la condena a muerte no era por ser ladrón de nada. El Libro de estilo manda que los titulares han de ser inequívocos y responder fielmente a la información. En este caso no se tuvo en cuenta la norma.
Pie de foto
Los pies de fotografías están siendo últimamente motivo de protestas (véase El Ombudsman del 17 de octubre). La última viene provocada por el que acompañaba una imagen de la sede del PSOE en Santiago de Compostela la noche de las elecciones autonómicas de Galicia, publicada el 24 de octubre, como ilustración de un comentario en el suplemento Domingo. La foto muestra el local, en el que se ve un estrado vacío y, en primer plano, un hombre sentado en un escalón; junto a él, un monitor de televisión encendido. El pie dice: "Desolación y tristeza en la sede del PSOE de Santiago tras el descalabro electoral".
Desde La Coruña, Segundo García Souto, la persona que aparece en la imagen, escribe al defensor de los lectores para manifestar que considera del todo inadecuada la elección de la instantánea: "La razón fundamental de mi malestar y mi sorpresa al verme fotografiado en solitario de ese modo radica en el pie". Afirma que "en absoluto" está vinculado al PSOE: "Mi presencia en el acto al que pertenece la foto en cuestión se debe exclusivamente a motivos profesionales". Cuenta que estaba llevando a cabo un trabajo de "seguimiento informativo" para una cadena de televisión: la imagen refleja "un momento de pausa en medio de la jornada electoral de 17 de octubre". Y aclara: "Ésa es la razón de que me vea en esa actitud, en ningún caso de abatimiento, tristeza o desolación, sino de puro agotamiento físico".
En la sección de edición del suplemento responden a la queja de García Souto: "Lamentamos haber herido la extrema susceptibilidad de la persona, cuyo nombre no citamos, que se encontraba sentada en el estrado de la sede del PSOE el pasado 17 de octubre, tras el fracaso electoral socialista".
La queja del lector y el lamento posterior podrían haberse evitado, sencillamente, si se hubiera cumplido lo que manda el Libro de estilo respecto a las fotografías. La norma, reiteradamente citada en esta columna, es clara: "Los pies deben ser puramente informativos e independientes del texto a que acompañan".
El pie publicado ha resultado una interpretación valorativa de la escena.
El teléfono directo del Ombudsman es 3042848.
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