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Sólo la Universidad Politécnica abrió la mayor parte de sus clases

EL PAÍS Cuatro de las cinco universidades públicas madrileñas secundaron masivamente la huelga y la marcha convocada contra la subida de las tasas. La quinta, la Politécnica, en la que hay matriculados alrededor de 50.000 alumnos, fue la única que se desmarcó de la jornada de protesta. Al menos cinco institutos acudieron a la plaza de España en solidaridad con sus mayores y en Móstoles trescientos estudiantes también de enseñanza media cortaron el centro de la segunda ciudad más grande de Madrid. Los privados tampoco quedaron al margen. El 80% de los alumnos del Centro de Estudios Superiores, por ejemplo, en Boadilla, fueron a la huelga.

La paralización de la docencia fue casi total en la Universidad Complutense, la más grande del Estado con 120.000 matriculados. También quedaron prácticamente desiertas las aulas en la Politécnica (32.000 estudiantes), en la de Alcalá de Henares (16.000 alumnos) y en la Carlos III, que entre los campus de Getafe y Leganés cuenta con 4.000 matriculados. En Madrid hay un total de 222.000 estudiantes que cursan sus carreras en las universidades públicas.

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La nota distintiva la ofreció sólo, la Universidad Politécnica. Sólo en tres facultades de las 19 que tiene esta universidad -Informática Superior, Informática Técnica y Telecomunicaciones Técnica- se registró una afluencia menor al 90% de estudiantes.

En Informática Superior no asistió nadie a clase y en Telecomunicaciones Técnica e Informática Técnica las clases se llenaron sólo en un 50%. En el resto, la afluencia a clase fue la habitual.

En los pasillos de la Escuela Superior de Ingenieros Aeronáuticos, por ejemplo, la normalidad era absoluta. Un estudiante de tercero, que acababa de salir de clase, decía ayer: 1,Aquí pocas veces hay mov1das. Yo, por lo menos, no las he visto nunca. Sólo ha pasado que una vez vino un grupo de estudiantes a recoger firmas contra las tasas".

Paradójicamente, en estas carreras impartidas en el campus de la Universidad Politécnica de Madrid el precio de la matrícula supera siempre las 100.000 pesetas, por lo que la subida del 12% ministerial equivale a una cantidad más elevada que en muchas de las carreras de Letras, que ayer se quedaron sin alumnos.

Por ejemplo, los estudiantes de Sociología, que pagan 55.800 pesetas por curso, protagonizaron un encierro la madrugada del miércoles y dejaron ayer los pupitres sin un alma.

En la Complutense se impartieron ayer sólo clases de prácticas en las facultades de Farmacia y Veterinaria. También en las facultades de Geografía e Historia y Química las aulas se abrieron, aunque sólo a primera hora de la mañana.

En la Universidad Autónoma, el seguimiento del paro fue más desigual. En la Facultad de Psicología, los alumnos acudieron con normalidad a las aulas.

PASA A LA PÁGINA 3

La Complutense, la Autónoma y la Carlos III secundaron masivamente la huelga

VIENE DE LA PÁGINA 1En la Universidad Autónoma, Patricia, una futura psicóloga que este año ha pagado 82.000 pesetas por un curso completo, se quejaba: "Tampoco han subido las tasas tanto como para armar estos follones. Creo que es mucho más importante no perder ni una clase que andar por ahí perdiendo el tiempo. Además, no se va a conseguir nada". Los alumnos de segundo cielo, es decir, los de cuarto y quinto cursos de las facultades de Ciencias, tampoco secundaron la huelga.

En cambio, los del primer ciclo, hasta tercero, y los alumnos de Medicina, escuelas de magisterio Santa María y de Segovia, Derecho, Económicas y Filología, secundaron la huelga en un 100%.

"Hacía mucho tiempo que no había ningún paro de estudiantes y está bien que empecemos a reivindicar nuestros derechos. Lo de las subidas de tasas este año es un abuso que no vamos a consentir", declaraba Jesús Barreiro, miembro de la Federación de Estudiantes de Izquierda de la Autónoma.

En Alcalá de Henares tan sólo los estudiantes de Económicas y Empresariales del turno de mañana asistieron ayer a clase con cierta regularidad. Según datos facilitados por los responsables de conserjería de esta facultad, en las tres aulas de primero asistieron la mitad de los alumnos, porcentaje que se redujo al 25% en cursos superiores. En quinto no hubo clases. Una profesora de Ciencias Empresariales explicaba ayer tarde que nadie había notificado a los profesores que hubiese huelga.

Sí lo hicieron, por ejemplo, los delegados de Derecho, aunque muy apurados de tiempo. Llamaron al decanato a las nueve de la mañana para anunciar que habían decidido sumarse a la convocatoria de huelga general.

Según los datos facilitados por el portavoz de los delegados estudiantiles, Juan García, el seguimiento de la huelga fue del 100%, a excepción de Medicina, donde se impartió una asignatura de sexto curso.

La situación era un poco especial en Ciencias. Ningún profesor de asignaturas teóricas acudió a dar clase, pero sí lo hicieron los de prácticas. El motivo: son irrecuperables. A pesar de esto, no se encontraron con muchos alumnos. En uno de los grupos, de 30 convocados acudieron sólo tres.

La respuesta a la convocatoria de manifestación en Madrid capital fue en Alcalá de Henares bastante significativa. 200 estudiantes integraban el servicio de orden y los que se desplazaron en el tren de las diez de la mañana llenaron un convoy completo, unos seis vagones, portando las pancartas que habían desplegado durante el acto de la inauguración oficial del curso, en las que se podía leer: "Manos arriba, esto es un atraco" y "estudiar es un derecho, no un privilegio". El rector de la universidad alcalaína, Manuel Gala, no está de acuerdo con los estudiantes en que las tasas deban subir tanto como el coste de la vida.

Estadística del rector

En la Universidad Carlos III el seguimiento de la huelga fue casi total. Según fuentes del rectorado, que realizó sus estadísticas entre las 9.00 y las 12.00 horas de ayer, el seguimiento del paro estudiantil fue total en el campus politécnico de Leganés, donde no se registró actividad en ninguna de las clases correspondientes.

En el Centro Europeo de Estudios Superiores (campus de Boadilla del Monte), paró un 80% de los 5.00 0 alumnos. Los alumnos de este centro pagan 600.000 pesetas anuales y además la matrícula de la Complutense, universidad a la que se encuentra adscrito.

Esta información ha sido elaborada por Antonio Jiménez, Paz Álvarez, Arancha García de Sola, Susana Moreno, Víctor Saornil y Pilar García de la Granja.

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