Dimite el jefe del Ejército italiano tras enfrentarse con el ministro de Defensa

PERU EGURBIDE, El jefe del Estado Mayor del Ejército, italiano, general Goffredo Canino, presentó el pasado jueves su dimisión en protesta por el modo en que el ministro de Defensa, el socialista Fabio Fabbri, condujo la crisis desatada por la falsa denuncia de un golpe de Estado. En un tono de abierto enfrentamiento, Canino reprocha a Fabbri la decisión "gravísima" y adoptada contra su opinión "explícita y firmemente contraria" de haber destituido al jefe militar de la Toscana, general Biagio Rizzo.

El propio Rizzo reaccionó durísimamente contra su destitución, comunicada el mismo día en que la denuncia del supuesto golpe de Estado comenzó a perder fuerza. La defenestración de Rizzo se produjo des pués de confirmarse que Gianni Nardi, un terrorista de extrema derecha italiano que, según la denuncia de la trama, estaba en el centro del proyecto golpista, fue enterrado en Mallorca hace 17 años. En una alocución a sus subordinados, Rizzo expresó su "desdén" -aunque posteriormente, corrigió este término- frente a una destitución que considera ba "totalmente injusta".Fabbri justificó la sanción en el hecho de que Rizzo no hubiera tomado medidas contra el general Franco Monticone, antiguo jefe de la Fuerza de Intervención Rápida (FIR), cuando éste se había endeudado, sospechosamente con sus compañeros de armas para entregar la suma de 700 millones de liras a su ex amante, Donatella Di Rosa, que fue la que luego le denunció por golpismo.

Rizzo argumentó que en 1992, cuando estos hechos se gestaron a través de la denuncia por estafa que Monticone presentó contra Di Rosa, del bloqueo judicial de las cuentas bancarias de esta mujer y de su marido -que es otro militar amigo y subordinado de Monticone-, él no tenía mando sobre el ex jefe de las FIR. Por ello, Rizzo sostiene que no pudo hacer nada Para evitar la sucesión de hechos que desembocaron en la falsa denuncia del golpe, con el consiguiente daño de imagen para el Ejército.

Medida desproporcionada

Al dimitir, el jefe del Estado Mayor, Canino, insiste en que la destitución de Rizzo fue "desproporcionada" con respecto a sus responsabilidades y ha tenido "repercusiones altamente negativas sobre la moral del Ejército en todos sus niveles". El Gobierno italiano nombró ayer al general de la Armada Bonifazio Incisa di Camerana como nuevo jefe del Estado Mayor del Ejército en sustitución de Canino.

Umberto Capuzzo, un ex general muy conservador, actualmente senador democristiano, coincidió ayer en que "hay un enorme malhumor entre los militares por lo que ha sucedido". "Las Fuerzas Armadas no deben ser humilladas de este modo", señaló.

El malestar de Canino como el de muchos militares italianos, no se refiere sólo a este incidente. Este general se enfrentó públicamente hace pocas semanas alas declaraciones secesionistas del líder de la Liga Norte, Umberto Bossi, y afirmó que el Ejército defendería la unidad de Italia en cualquier caso. Fabbri intervino para precisar, aún dando la razón de fondo a Canino, que el jefe del Ejército no debe hacer declaraciones políticas. Diversas voces civiles coincidieron ayer en las críticas al ministro Fabbri.