Fotografías

En EL PAíS Madrid se publicó el 4 de octubre una fotonoticia, titulada Humana crueldad, cuyo pie ha provocado varias protestas de lectores. Uno de estos comunicantes, Ruth González Toledano, dice que su "sorpresa e indignación han sido mayúsculas". Se trataba de una fotografía de la manifestación que, organizada por la Asociación Nacional para la Defensa de los Animales, exigía para éstos una ley que los proteja de los malos tratos. En la imagen se ve a un grupo de personas, que portan una pancarta, pasando junto a un banco de piedra en el que yace durmiendo un supuesto indigente. En el texto explicativo, después de hacer referencia al motivo de la manifestación, se leía esta frase: "Para el vagabundo de la fotografía, en cambio, nadie exigió justicia". Ruth González considera que estas palabras suponen "una falta absoluta de rigor informativo". Y emite un juicio severo: "Se incurre en el más deleznable de los cánceres que asolan a la comunicación periodística y que suponíamos reservado a otros sectores de la prensa nacional: el peor de los amarillismos y el más ofensivo de los sensacionalismos".Berta Herrera expresa su "estupor": "Considero inadecuados tanto la foto como el exiguo texto que la acompaña: su sentido no tiene nada que ver con el motivo que reunió allí a más de mil personas y supone una insultante alusión a los asistentes y a cuantos se interesan por tan desinteresada causa

José Antonio Mendizábal se lamenta: "Siento que EL PAÍS, del cual soy lector habitual, cuente con periodistas con tan pocos recursos mentales como el que escribió el pie de foto". De este tenor son otras cartas recibidas en el periódico.

El redactor jefe Alex Grijelmo no se anda con paños calientes: "Tienen razón quienes protestan por ese pie de foto. Me parece inadecuado para el estilo de nuestro periódico, y así se lo hice saber a quien lo escribió. Nos hemos disculpado con todas las personas que han telefoneado para expresar su queja, y hemos publicado ya dos cartas al director en ese sentido. Cuando alguien se equivoca debe reconocerlo, y así lo hacernos".

Material de archivo

El Libro de estilo de EL PAÍS llama la atención sobre el empleo de fotografías de archivo: señala que debe extremarse el cuidado con su publicación como simple ilustración de contenidos de actualidad. Este cuidado no siempre se tiene, como en más de una ocasión se ha puesto de manifiesto en esta columna. Un nuevo caso de descuido se ha producido el 21 de septiembre (edición de Andalucía), que es denunciado por Pablo Domínguez, presidente de la Asociación de Comerciantes e Industriales de La Carihuela-Montemar, en Torremolinos (Málaga).

La información titulada Obras Públicas saca a subasta las obras de La Carihuela con tres años de retraso, que trataba del proyecto de construcción del paseo Marítimo, iba acompañada de una foto en la que se ve en primer plano parte de los destrozos causados por el mar en dicho paseo. El pie decía, simplemente: "Playa de La Carihuela". Sin más dato. Domínguez protesta: "La fotografía, y su correspondiente pie, induce a confundir al lector que no conozca la zona, por cuanto corresponde al estado del paseo Marítimo y playa de La Carihuela cuando los últimos temporales de Levante causaron grandes destrozos, en el año 1989".

Desde Sevilla, la delegada de EL PAÍS, Sol Fuertes, explica que la Redacción de Andalucía no cuenta con archivo fotográfico propio: para ilustrar algunas informaciones se recurre al de Madrid en solicitud del tema gráfico que se necesita y se indica en qué página debe ir. "En el caso que nos ocupa", cuenta, "la confusión se produjo al pedir una foto de La Carihuela para ilustrar la información sobre el retraso en la acometida de unas obras en el paseo Marítimo". Desde Madrid se remitió por fax a Sevilla una reproducción de la fotografía. "La mala calidad con que llegan las copias -casi todas negras- impidió comprobar con exactitud y detalle la imagen". Sol Fuertes juzga que "contribuyó a la confusión la similitud del tema que se pedía -la construcción del nuevo paseo Marítimo de la playa sobre el mismo trazado que el actual, muy deteriorado, según la información- con la imagen que salió por error: los destrozos del temporal".

Al tratarse de un material de archivo, pudo suponerse que no era una foto actual, lo que, también según el Libro de estilo, obligaba a expresar en el pie a qué fecha y situación correspondía. Esta simple aclaración, dice Pablo Domínguez, a pie de foto "hubiera evitado el evidente daño a la buena imagen que habrá causado en la mayor parte del territorio donde se distribuye esta edición de Andalucía".

El teléfono directo del Ombudsman es 3042848.