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El Gobierno se acerca a CiU en el IRPF y le ofrece nuevos traspasos

El Gobierno ha puesto sobre la mesa del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, un paquete de medidas autonómicas con la intención de aproximarse a CiU y demostrar su voluntad de afrontar la legislatura con voluntad de consenso. Asimismo, el consejero de Hacienda de la Generalitat, Maciá Alavedra, expresó ayer en Madrid su satisfacción por el avance que, a su juicio, ha experimentado el Gobierno en su propuesta de participación de las comunidades autónomas en el IRPE "El Gobierno pretende premiar el esfuerzo fiscal. Ya no se habla tanto de neutralidad", dijo.

El ministro de Administraciones Públicas, Jerónimo Saavedra, ha sido el encargado de transmitir a Jordi Pujol las cuestiones en las que el Gobierno puede cerrar a muy corto plazo un acuerdo que satisfaga a los nacionalistas.La propuesta del Gobierno consiste en tender a la administración única -que sólo la administración autonómica tenga competencias, por la vía de la transferencia o delegación de funciones- en Agricultura, puertos y costas; culminar el traspaso del personal de la Administración de Justicia; modificar la ley de bases de Régimen Local para que las convocatorias para cubrir las plazas de secretarios e interventores se haga con intervención de la Generalitat, siguiendo un criterio que ya rige en el País Vasco; e incluir la entidad administrativa de las comarcas como beneficiaria del Fondo de Cooperación Local, que nutre las arcas municipales.

Dirigentes de Convergència valoran la oferta del Gobierno socialista como "un primer paso", aunque resaltan que "aún es insuficiente" para estar seguros de que va a haber "un talante nuevo" en política autonómica. El presidente de la Generalitat insistió ayer en mantener silencio sobre el amplio paquete que negocian nacionalistas y socialistas que incluye además de cuestiones autonómicas, la cesión del 15% del IRPF y los Presupuestos Generales del Estado.

Su mutismo no tiene otro objetivo que reservarse el mayor margen de maniobra en unas negociaciones que considera sumamente difíciles y donde se juntan intereses tan dispares en el seno de la coalición nacionalista. Jordi Pujol pone el acento en cerrar de una manera satisfactoria la cesión del 15% del IRPF como condición previa a cualquier otro compromiso con los socialistas. Para el presidente de la Generalitat, el acuerdo sobre la cesión del IRPF es la llave que abre todos los demás pactos parlamentarios aunque insiste en que para un acuerdo en esta cuestión se lo tendrán que poner "muy claro y muy bien".

Expresividad de Alavedra

Sin embargo, el consejero de Hacienda de la Generalitat, Macià Alavedra, fue ayer expresivo en Madrid, tras las más de tres horas de reunión que el secretario de Estado de Hacienda, Enrique Martínez Robles, mantuvo con los consejeros de Hacienda autonómicos para avanzar en la participación de las comunidades autónomas en el IRPF. Alavedra dijo que se ha producido un avance en la negociación y que el Gobierno "ha cambiado de filosofía". Según el consejero de Hacienda de la Generalitat, en la reunión de ayer se constató que el Ejecutivo ha apostado por "premiar el esfuerzo fiscal" de las comunidades autónomas. "Ya no se habla tanto de neutralidad", dijo Alavedra.En la reunión de ayer el Gobierno retomó el debate donde había quedado el pasado jueves: el establecimiento de los topes máximos y mínimos para limitar el reparto entre las comunidades. El secretario de Estado de Hacienda estableció un tope mínimo del 1% y un tope máximo del 5% frente al 3% anterior, lo que permite un mayor margen a quienes reclaman mayor autonomía financiera.

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El secretario de Hacienda entregó a los consejeros autonómicos nuevos datos para que realicen simulaciones económicas sobre la aplicación de la fórmula en su comunidad. La pretensión del Gobierno es mantener contactos bilaterales con las comunidades para preparar la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera del próximo día 7 de octubre.

El consejero de Hacienda de la Junta de Extremadura, Manuel Amigo, manifestó, en contraste con Macià, que en la reunión de ayer no se había avanzado hacia la solución final porque la propuesta de Hacienda supone "la invalidación de todos los cálculos que se habían realizado hasta el momento". Además del pronunciamiento la víspera de Unió, el PNV manifestó ayer que no aseguraba el apoyo a los presupuestos. La Junta de portavoces del Congreso acordó ayer realizar el debate de totalidad del proyecto de presupuestos los días 20 y 21 de octubre, informa Juan G. Ibáñez. El vicelehendakari Jon Azúa, indicó ayer que si no se modifican los presupuestos el PNV interpondrá una enmienda a la totalidad. Azúa subrayó que su partido sólo apoyará el presupuesto en "el marco de una negociación global". "Las declaraciones de González, en el sentido de que hay aproximaciones en el presupuesto y gran avance, no se corresponden con la realidad de quienes estamos negociando", informa Eva Larrauri.

Sin embargo, Carlos Solchaga se mostró convencido de poder alcanzar un acuerdo con CiU y el PNV sobre los presupuestos, e insistió en que los socialistas mantienen el propósito de conseguir cuanto antes un pacto de legislatura. Solchaga alentó la esperanza de Ilegar a una visión conjunta, en relativamente poco tiempo", con los vascos. Según él, aunque no exista una plena coincidencia sobre el traspaso de las 50 competencias que reclaman los nacionalistas, es factible un pacto.

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