Hosokawa rechazará hoy ante Clinton imposiciones para reducir superávit
El primer ministro japones, Morihiro Hosokawa, sostenido por una precaria coalición de ocho partidos y de quien no es previsible esperar cambios sustanciales en la tradicional y conflictiva relación comercial con EE UU, se entrevista hoy en Nueva York con el presidente norteamericano, Bill Clinton, a quien reiterará, al menos públicamente, la postura nipona de no aceptar objetivos númericos verificables en el programa conjunto para reducir el abultado superlivit comercial de Tokio con Washington."Contravendría el principio de libre comercio" ha manifestado Hosokawa coincidiendo con la argumentación del gobierno derrotado en las elecciones generales de julio. "Pediré a Estados Unidos que mejore su copetitividad internacional y reduzca el déficit público. Nuestro superávit comercial no puede solucionarse con cambios estructurales en una sola economía". Fuentes oficiales reconocieron que si se aprueban explícitamente metas en números para equilibrar la balanza, -el superávit comercial con EE UU se elevada 50.000 millones de dólares-, MIashington tendría las manos libres para aplicar represalias caso de no cumplirse.
Excedente
No todos los integrantes de la coalición gubernamental están de acuerdo, sin embargo, en rechazar las demandas de Estados Unidos, que pide la reducción del excedente por cuenta corriente japonés hasta que signifique menos del 2% del PNB. Este superávit, que sobrepasa los 117.000 millones de (lólares, equivale ahora al 3,2% del PNB, y la tendencia es alcista. El ejecutivo nipón ha decido de momento subrayar oficialmente la negativa a las cuantificaciones numéricas e intentar mayores coincidencias en la lectura del acuerdo bilateral suscrito duran-.e la pasada cumbre del Grupo de Los Siete en Tokio.
Los japoneses niegan que en aquel compromiso marco, en cuya interpretación discrepan con los negociadores norteamericanos, hubieran aceptado objetivos numéricos. Según fuentes oficiales estuvieron de acuerdo en aplicar "criterios objetivos" en el proceso hacia el equilibrio comercial.
La resistencia de la administración japonesa a aplicar con prontitud medidas radicales para lograr una visible disminución del superávit está siendo contestada en Japón por quienes en el sector privado temen que la administración norteamericana decida medidas de fuerza. La pasividad de la Reserva Federal durante la la rápida apreciación del yen frente al dólar, corregida parcialmente cuando la. paridad de la moneda norteamericana amenazaba con bajar de los 100 puntos, ha sido vista en1 re los exportadores perjudicadm como un advertencia.
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