El congreso regional del PP deja en el aire el apoyo de los ediles díscolos al alcalde

Primero se habló de "exclusión" y "listas negras" entre la vieja guardia ideológica o generacional del Partido Popular, y ahora se le llama "integración". El camino de la renovación o segunda refundación del PP ante las próximas elecciones municipales y autonómicas -dentro de casi dos años- ha comenzado, pero de forma traumática. Dos concejales del Ayuntamiento de Madrid procedentes de Alianza Popular han planteado la batalla para no ser relegados, y nadie en su partido está seguro de que con la amenaza de su voto no vayan a poner en peligro la actual mayoría absoluta.

El Congreso Regional del PP empieza hoy a las diez de la mañana en el Palacio Municipal de Congresos que el Ayuntamiento de Madrid acaba de construir en el Campo de las Naciones.Acudirán 1.500 compromisarios a dar el visto bueno al finiquito de la gestión del anterior presidente, Luis Eduardo Cortés, que ha permanecido casi siete años en el cargo sin convocar elecciones internas. Pero también ratificarán otro espíritu: "Hay que rejuvenecer incluso a los que tengan 50 años". El congreso estará huérfano de contenido técnico. Sólo se discutirá una ponencia, la de organización, a la que, sin embargo, sí se le interpondrán numerosas cuestiones "de estilo".

Habrá 41 enmendantes que pretenden plantear 151 sugerencias, de las que 25 (15%) ya parten con grandes posibilidades de ser aceptadas.

No se espera ninguna novedad de relevancia entre las proposiciones. El concejal Ángel Larroca, presidente de la Junta de distrito de Salamanca, ha retirado una de las más polémicas e interesantes. Reclamaba listas abiertas para el comité ejecutivo y para la comisión institucional (órgano de poder formado por los grandes líderes locales, regionales y nacionales del partido).

En cambio, será asumida otra procedente del distrito de Salamanca para dar más presencia en el comité a las Nuevas Generaciones. El secretario de esta organización en Madrid, Benjamín Martín, entrará así en una directiva que presidirá el diputado autonómico Pío García Escudero y de la que será secretario general el parlamentario regional Ignacio del Río. No figurarán, por el contrario, ni el concejal Venancio Mota ni su compañero Manuel Martínez Blanco, considerados los díscolos de la corporación madrileña por su pelea para evitar su exclusión.

Nadie admite en el PP que los ediles puedan amenazar a corto plazo con su abandono del equipo de Gobierno y su pase al grupo mixto en el Ayuntamiento de Madrid, con lo que el PP perdería la mayoría absoluta en la capital. Fuentes del equipo de gobierno, no obstante, temen esta posibilidad si los concejales ven peligrar su futuro político.