Pete Townshend graba un disco sobre la verdad manipulada
El ex guitarrista de The Who publica 'Psychoderelict', un trabajo conceptual
A sus 48 años, Pete Townshend, ex guitarrista de The Who, sigue buscando nuevas fórmulas creativas. Psychoderelict, que acaba de aparecer en España, se podría traducir por psicoabandono o psicodestrucción, y es "una obra de teatro radiofónica intercalada con canciones", según explicó su creador en la presentación del álbum en Londres. El creador de Tommy ha creado una historia sobre la manipulación de la verdad por los medios de comunicación.
La carrera artística de Pete Townshend, el cerebro de los desaparecidos The Who, se ha caracterizado invariablemente por la experimentación y las intercalaciones dramáticas en sus composiciones musicales. A Tommy, la ópera rock sobre un joven mudo y ciego, de 1969, sucedió Quadrophenia cuatro años más tarde, en la que The Who vuelven una nostálgica mirada hacia los primeros años de la década de los setenta. Hoy, Townshend vuelve a la carga."Las nuevas canciones son simples y sutiles, pero la energía reposa en su contenido", afirma. "Sin embargo, me di cuenta que no tienen la fuerza que esperaba de ellas y la radionovela añade el elemento contextual vital al proyecto", señala Townshend.
Los personajes principales de la representación teatral -Ray, un rockero en edad avanzada que lleva dos años encerrado en su habitación soñando con reproducir un viejo proyecto de los años setenta; Rastus, un representante desesperado por la inacción de su protegido, y Ruth, una locutora de una emisora de radio que desprecia al rockero- no dejan dudas sobre el carácter autobiográfico del trabajo de Townshend. "Es obvio que hay algo de mí en Ray", explica el artista, para continuar: "Muchos de sus comentarios los he extraído de ensayos o tormentas mentales. Algunas ideas se remontan 25 años en el pasado". La periodista tergiversa las cartas que el rockero envía a una fan con un doble objetivo: sacar a Ray de su enclaustramiento y participar, junto al representante, de los beneficios que se multiplican con el relanzamiento del artista. Pero, además, Townshend aprovecha la personalidad de Ray para recuperar un antiguo proyecto, Lifehouse, que no vio la luz en su día por ser, según señala su autor, "demasiado ambicioso".
Musical futurista
Ray tiene un sueño, Gridlife (algo así como red vital), representado en el álbum por un musical futurista sobre realidad virtual. Los temas de Gridlife transportan este proyecto conceptual a la música de los años setenta de The Who. "Le di a Ray un auténtico sueño mío, Lifehouse, un guión que debería haber seguido a Tommy, explica el ex guitarrista de The Who. Estos temas, que se incluyeron por primera vez en el álbum Who's next, de 1971, recrean un periodo determinado en la trayectoria de Townshend cuando vivió una "obsesión electrónica", según sus propias palabras.Al margen de esta evocación por los setenta y la radionovela, los temas hablan de la honestidad en las relaciones, de la evolución de la sociedad e introducen un debate en tomo a la verdad de las informaciones. Townshend cuestiona la veracidad de los hechos que difunden los medios de comunicación: "¿Se puede extraer la verdad de lo que leemos en los periódicos?", pregunta el artista. "Además", sigue, "la historia parece estar montada en función de lo que los historiadores deciden que sucedió. Y esto no siempre es verdad".
La visión que presenta Townshend sobre la sociedad del futuro se concreta en un mundo lleno de bases de datos cargadas de hechos. El ciudadano tendrá acceso a la información y podrá de esta forma decidir su propia versión de la verdad. Sin embargo, el artista no está seguro cuál sociedad será mejor y, en su último trabajo conceptual, se pregunta si "en el futuro tecnológico estaremos más próximos a la verdad o nos alejaremos de ella".
Lo cierto es que Townshend, a través de Ray, reclama el sueño de la sociedad de los años sesenta, cuando prevalecía la idea original de que, como él mismo explica, "una canción pop refleja algo por sí misma".
Babelia
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