44 años de prisión para un hombre que violaba a su hija desde los seis años

La Audiencia Provincial de León ha condenado a 44 años de cárcel a Agustín Santín, un minero jubilado de 37 años de edad, por dos delitos de violación y uno continuado de estupro contra su hija Sandra, hoy de 14 años, según fuentes judiciales. La pequeña sufrió las agresiones sexuales de su padre en el propio domicilio familiar, primero en la localidad de Fabero y luego en el pueblo del Espino, desde que tenía seis años, cuando se encontraba fuera de la casa la madre. La sentencia quita al condenado la patria potestad e impone una indemnización de cinco millones de pesetas a la víctima.Agustín Santín, detenido por las fuerzas del orden hace poco más de dos años, era considerado en el pueblo del Espino como "una persona normal" y "no violenta". La sentencia puede ser recurrida ante el Tribunal Supremo.

La acusación particular solicitaba dos penas de 34 años de prisión entre ambas mientras que el fiscal pidió los 44 años de cárcel por violación y estupro. Los hechos se descubrieron en 1991 cuando la pequeña, con 12 años, contó a su abuela y más tarde a su madre las agresiones sexuales de que era objeto por parte de su padre.

La niña era amenazada de muerte por su progenitor si contaba a alguien lo que ocurría entre los dos. Las pruebas practicadas reflejan que el condenado no presenta ninguna deficiencia intelectual ni psicopatológica.

La niña padecía desde pequeña irritaciones vaginales, aunque sólo se supo el motivo de esto al descubrirse la agresión continuada de que era objeto. En el juicio oral, celebrado en León los pasados días 8 y 9 de julio, el acusado negó todos los hechos que se le imputaban, aunque las pruebas periciales y testificales demostraron la veracidad de las declaraciones de la niña.