Solchaga se compromete "solemnemente" al diálogo con todos los grupos políticos
Carlos Solchaga estrenó ayer su cargo de portavoz socialista en el Congreso ofreciendo "formal y solemnemente" una actitud de diálogo con el resto de los grupos de la Cámara para buscar "los consensos, tan amplios como sean posibles, sin buscar el aislamiento de nadie". Al mismo tiempo que formulaba esta declaración, Solchaga admitió que su actitud pasará "por el reconocimientoexacto, cabal, del peso de cada una de las fuerzas políticas en esta Cámara", con lo que formulaba también un reconocimiento implícito de la situación de minoría mayoritaria en que se encuentra su partido.
El peso político del nuevo portavoz socialista quedó patente no sólo en la atención con que la Cámara siguió su discurso, sino en el contenido de sus palabras, que fueron más allá de la habitual exégesis a la que solían limitarse los portavoces del grupo del Gobierno.El todavía ministro en funciones se detuvo en explicar a la Cámara que las elecciones las ha ganado el partido socialista, y para ello se refirió al discurso del líder del Partido, Popular, José María Aznar. Primero, para destacar que si se lee "con cuidado", las alternativas que éste ofrecía no eran tan diferentes de las que ha planteado el jefe del Gobierno, pero sobre todo para indicar que Aznar "fue discreto" cuando, antes de mostrar su desconfianza hacia el candidato a la investidura, admitió que "el tema de la confianza quedaba relativizado por unos resultados electorales inapelables".
Solchaga advirtió que referirse a la confianza que pueda despertar González en este momento es un argumento muy débil, puesto que "hace tan sólo un mes" los ciudadanos "han explicado claramente quién cuenta con más confianza de entre todos los grupos políticos y de entre todos los candidatos".
Voto de esperanza
Para Solchaga, el voto del 6 de junio es fundamentalmente "un voto de esperanza" y no "de esperanza alocada o de esperanza contra la realidad", lo cual, dijo, "demuestra un país que cada vez es más abierto" y "sigue teniendo esperanza en su futuro".
El orador puso en contraste ese caudal de esperanza y el importante apoyo conseguido por el candidato a la investidura con la apuesta por un Gobierno que no sea fuerte, de los que denominó "profetas del desastre", tan frecuentes en este país, dijo.
El nuevo portavoz de los socialistas hizo hincapié en el "raro fenómeno político" que supone el que González consiga por cuarta vez la investidura como presidente de Gobierno, y aprovechó para referirse, sin citarlos, a algunos sectores de los medios de comunicación, a los que "con frecuencia les gusta mucho explicamos a los parlamentarios y a los partidos políticos qué es lo que tenemos que hacer o qué decir en esta Cámara".
Según Solchaga, desde esas posiciones se ha tratado de "explicar los resultados de las últimas elecciones hablando de las diferencias de calidad de voto o haciendo mención a los votos del agradecimiento". Eso constituye, aseguró, una gran equivocación, antes de advertir a la Cámara: "¡Ay de aquel político que piense en el agradecimiento como principal motivo de su actuación política!".
Por su parte, el nuevo portavoz socialista en el Senado, Bernardo Bayona, manifestaba ayer a Europa Press que el PSOE negociará con ánimo generoso con el resto de los grupos parlamentarios la presidencia de las comisiones de la Cámara alta, a pesar de que tradicionalmente el partido con una mayoría minoritaria presidía todas ellas, como sucedió con el Gobierno de UCI).
En la anterior legislatura, con el PSOE con mayoría absoluta, sólo una comisión ordinaria, la de Presupuestos, estaba presidida por la oposición, en este caso por el Partido Popular. Bayona reconoció que en esta ocasión, aparte del PP, su grupo deberá tener en cuenta las peticiones de Convergència y Unió (CiU), coalición que tiene una de las llaves para que las iniciativas del PSOE puedan salir adelante.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.