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El acuerdo comercial beneficia a los exportadores de la Comunidad

Lluís Bassets

Los países de la Comunidad Europea (CE) en su conjunto son exportadores netos en siete de los ocho sectores Incluidos en el acuerdo comercial firmado por los ministros de Comercio del G-7, según la nota del representante de la Comisión Europea, el comisario de Comercio, Leon Brittan.Los Doce obtendrán así beneficios en la liberalización comercial prevista para productos farmacéuticos, maquinaria para la construcción, cerveza, acero, licores, muebles y equipamiento para la agricultura, sectores en los que los Doce cuentan con balanzas comerciales positivas. El único sector negativo es el equipamiento médico.

Leon Brittan, como uno de los principales artífices del acuerdo, aseguró que "dará un nuevo impulso a las negociaciones de Ginebra, iluminando la perspectiva de un acuerdo global en el GATT [Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio]". El comisario calificó el acuerdo de "sustancial, pero no final, por supuesto", y recordó que ahora todo depende de la adhesión al acuerdo de los otros países que forman parte del GATT."No hay acuerdo sobre nada hasta que no haya acuerdo sobre todo", añadió Brittan. Idéntica expresión utiliza el Gobierno francés, a quien se deben hasta ahora las mayores reservas a los avances en las negociaciones de liberalización comercial entre la CE y Estados Unidos. Brittan aseguró también que el éxito en uno de los sectores incluidos en Tokio, el del acero, depende ahora de "la flexibilidad por parte de Estados Unidos, cosa que significa una solución satisfactoria a la disputa en curso sobre medidas anti-dumping y anti-subvención impuestas por Estados Unidos a los exportadores de acero europeos".

Esta argumentación significa, en la práctica, que Brittan reconoce parte de la razón que asiste al Gobierno del francés Edouard Balladur, quien se ha negado a asistir a la cumbre del G-7 en razón de las sanciones de Estados Unidos, que cierran totalmente su mercado a las exportaciones de aceros europeos. El presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors, que ha preferido cuidar de su ciática en vez de asistir a la reunión, no está lejos de las posiciones de Balladur sobre las sanciones.

El acuerdo de ayer significa, en cierta forma, una victoria personal del comisario europeo de Comercio, quien se hizo cargo de la nueva cartera en enero en pleno clima de deterioro comercial entre Bruselas y Washington.

Brittan ha intentado realizar avances en todos los terrenos en las relaciones con Estados Unidos. Ha conseguido cerrar, con la firma de Francia, el acuerdo agrícola sobre oleaginosas, que no es parte de la Ronda de Uruguay, pero contribuye a mejorar el clima comercial. Cerró un acuerdo parcial sobre acceso a mercados públicos. Y ahora ha obtenido el acuerdo cuatripartito, que debe contribuir a dar un impulso sustancial a la Ronda de Uruguay.

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Sobre la firma

Lluís Bassets
Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).

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