El PP mejorará relaciones con los nacionalistas aunque pacten con el PSOE

José María Aznar quiere estar más presente durante la nueva legislatura en los bancos del Congreso de los Diputados, y del Senado, asegurar personalmente la dirección política de los grupos de su partido en ambas cámaras y estrechar relaciones con las formaciones nacionalistas de centro derecha, pacten o no con el partido socialista. Así lo anunció ayer a mediodía en los pasillos del Congreso tras presentar la documentación que le acredita como diputado electo por Madrid y después de dejar claro que no piensa renunciar al derecho al pataleo colectivo en ciertas sesiones parlamentarias.

Aznar confirmó en los pasillos de la Cámara baja su intención de profundizar las relaciones con CiU y el PNV, al margen de la decisión que éstos adopten sobre su papel en un Gobierno de coalición con los socialistas, en un pacto de legislatura o en acuerdos concretos. Los populares quieren mantener relaciones con todos los grupos parlamentarios, y su intensidad no dependerá sólo de los otros, "también de nosotros", dijo. "La relación no va a depender de lo que decidan ellos"' en torno a los pactos de gobierno.El presidente del PP insistió en su compromiso, manifestado ya el lunes ante la junta directiva del partido, de respetar todas las iniciativas para la formación de un Ejecutivo, al menos hasta que se produzca el encargo formal a Felipe González por parte del Rey y su investidura en el Congreso. "No tengo noticia directa", respondió sobre la decisión que puedan tomar los dos principales grupos nacionalistas. "Tengo una impresión, pero no viene al caso".

No obstante, Aznar, que se refiere siempre al Grupo Socialista como la "minoría mayoritaria", sigue pensando en el papel decisivo de su propio grupo para la gobernabilidad y la estabilidad, en lo que cabe interpretar como un deseo de obtener participación en acuerdos amplios, capaces de condicionar la acción del Gobierno.

Por ello, volvió ayer a destacar una circunstancia novedosa en la vida parlamentaria. La distancia entre "la minoría mayoritaria" y el primer partido de la oposición en el Congreso de los Diputados es "la menor que ha habido nunca" desde el inicio de la transición democrática, tan sólo de 18 diputados. "Lo demás pueden ser combinaciones muy respetables", declaró el líder del PP, "pero no entro a valorarlas. Yo deseo que se forme un Gobierno estable", agregó, "aunque no tenemos confianza en que si la minoría mayoritaria logra la investidura vaya a llevar al país por el rumbo adecuado"

Errores y aciertos

El presidente del principal partido de la oposición no tiene ningún temor a una nueva fase de aislamiento de su grupo parlamentario como la que se produjo en los dos últimos años de la pasada legislatura, según dijo, porque basta ver el resultado en forma de retroceso electoral de todos los que participaron en la operación durante la pasada legislatura.

El Grupo Socialista tiene 16 escaños menos, el CDS ha desaparecido de la escena parlamentaria, los peneuvistas se mantienen igual y los convergentes de Jordi Pujol han conseguido un representante menos, mientras los populares aumentaban de 107 a 141 diputados. "Está bastante claro", sentenció, "quién se equivocó en sus apreciaciones y quién acertó en la estrategia política de los últimos años".

Aznar afronta la legislatura con mayores responsabilidades parlamentarias. Por decisión del congreso extraordinario del partido, celebrado el pasado febrero, ahora presidirá los grupos del Congreso y del Senado. Su papel será, según ha explicado, ejercer la dirección política de ambos, por lo que deberá "mantener mayor contacto" y estar "más tiempo físicamente en las cámaras".

Como primera medida, el líder de los populares no piensa renunciar al derecho al pataleo. Preguntado ayer cómo corregirá las expresiones de desagrado que su grupo de diputados acostumbra a manifestar de forma ruidosa y sin palabras, Aznar rechazó que tales expresiones deban ser corregidas, porque "forman parte de la mecánica parlamentaria". Aunque lo más importante, agregó, será que se observe detrás de la actividad de su grupo "la madurez de un partido de gobierno" en "una nueva etapa".