La Liga conquista la alcaldía de Milán

Marco Formentini, un político muy de derechas, que incluso roza el extremismo, si se atiende a sus declaraciones sobre cómo resolver drásticamente el problema de los inmigrantes, conquistó ayer, según lo previsto, la alcaldía de Milán y el 60% del concejo para su partido, la Liga Norte. En la vecina Turín, en cambio, hubo sorpresa. Ganó Valentino Castellini, un profesor católico sin experiencia que había logrado en el primer turno de estos comicios, el pasado 6 de junio, un modesto 22% de los votos.

Diego Novelli, el candidato de La Rete y Refundación Comunista (RC), se había impuesto hace dos semanas en Turín con más del 38% de los votos. Perdió esta vez frente a un candidato poco conocido pero apoyado por los ex comunistas del Partido Democrático de la Izquierda (PDS) y otras fuerzas que incluían al presidente de Fiat, Giovanni Agnelli.Estos resultados otorgados por las primeras -pero suficientemente fieles- proyecciones del voto en los dos lugares principales de los 144 municipios y seis provincias afectadas por esta segunda vuelta indican una tendencia a la moderación de los electores del norte de Italia, en un contexto que tiende a la derecha del espectro político.

Esto es especialmente claro en Turín, donde, desoyendo los llamamiento a la abstención de su líder, Umberto Bossi, los votantes de la Liga decidieron la derrota de Novelli. En Milán, el voto de la derecha democristiana confluyó con el de los neofascistas para confirmar la victoria de Formentini sobre Nando Dalla Chiesa, el candidato del PDS, de RC y de La Rete.

Para los ex comunistas, que por lo demás consolidaron su triunfo en el centro de Italia, los resultados indican que el electorado septentrional les prefiere en una posición centrista, lo que implica que el fuerte avance de RC verificado en estas mismas elecciones representa una grave hipoteca para la estrategia de Achille Occhetto.

El voto del sur

En el sur, los candidatos democristianos lograron las alcaldías a las que aspiraban coaligados. En Sicilia, el candidato del partido antimafia La Rete se impuso en un Ayuntamiento como el de Agrigento,, donde el voto mayoritario fue democristiano, mientras en Catania, el republicano Enzo Bianco y Claudio Fava, de La Rete, mantenían un virtual empate que no se aclarará hasta el final del recuento.

El triunfo de la Liga en Milán, que es el dato más relevante de estas elecciones, resulta especialmente significativo a la vista de la actitud polémica del líder de la Liga, Umberto Bossi, que con su estilo violento, sus insultos e imprecaciones de mal tono, ha llevado esta campaña al límite de lo legalmente tolerable.

Bossi, presencia permanente en los mítines junto a Formentini, comenzó llamando " cornudo" a Dalla Chiesa una campaña en la que los dos políticos nuevos de Milán han representado precisamente el enfrentamiento tradicional derecha-izquierda.

El pasado viernes, con una gesticulación que expresaba machaconamente que a él nadie le toca lo intocable, Bossi empezó a llamar a Dalla Chiesa "Dalla Cosa Nostra" e incluso tachó de "delincuentes" a los jueces de Turín que no han atendido a su reclamación de que a la Liga se le ha escamoteado votos en el primer turno.

En todo el espectro político, y hasta para el presidente de la República, Oscar Luigi Scalfaro, estas intervenciones de un Bossi que, en lugar de moderarse, se incendia progresivamente con el éxito, han evocado el espectro del fascismo.