Magia nocturna

Alejandro Civilotti, nacido en La Plata el año 1959, residente en Barcelona y nacionalizado español desde 1988, ha obtenido el Premio de Composición para Piano Manuel Valcárcel, organizado por el Conservatorio Jesús de Monasterio con el patrocinio de la Fundación Marcelino Botín.La obra galardonada, Músicas nocturnas, es un ejemplo de la estética y los procedimientos de Civilotti, discípulo de Josep Soler y atento siempre a una microestructuración obediente a intenciones expresivas, a través de la consideración objetiva del sonido o de las combinaciones armónicas. Es obra que tiene magia y sólo por ella, puede aparentar un tanto impresionista.

Muy bien tocada por la pianista Maite Berrueta, nacida en Montevideo y hoy profesora en el conservatorio Amaniel de Madrid, las Músicas Nocturnas llegaron al público que cada vez se familiariza en mayor medida con los lenguajes modernos siempre que revelen una sustancia musical auténtica y comunicativa. Tocó también Berrueta el anterior premio Varcárcel, Preludios de la luz desvanecida, de Esteban Sanz Vélez (Maracaibo, 1960), residente en Santoña, en los que acusa una muy refinada sensibilidad más afecta a lo puntual que a lo armónico.

Este premio Manuel Valcárcel, fue fundado por el conservatorio Monasterio de la capital de Cantabria en homenaje a quien fuera su director y gran colaborador de Paloma O'Shea en los años iniciales del Concurso Internacional de Piano y recayó, en anteriores convocatorias, en Miguel Ángel Martín Lladó y Carlos Galán.

En el programa de la final, Maite Berrueta interpretó junto a las obras premiadas, la Toccata, de Miguel Ángel Samperio (Santander, 1936), flexible y brillante, la Sonatina, de Montsalvatge y un muy bello tríptico de Pedro Antonio Sáenz (Buenos Aires, 1915) de excelente traza pianística e intenso poder evocativo. Compositores y pianista fueron largamente ovacionados.