El Ejército del Aire prepara seis 'cazas' F-18 para usarlos en un eventual bombardeo sobre Bosnia
El presidente del Gobierno, Felipe González, afirmó el miércoles que "no debería sorprender a nadie que en los próximos días hubiera que tomar decisiones de una mayor presencia" militar española en la zona, tanto si el Parlamento serbio de Bosnia, reunido ayer, acepta el plan de paz Vance-Owen, como si lo rechazade nuevo.En el primer caso, España deberá. incrementar su contingente, compuesto por 950 militares, para integrarse en la fuerza multinacional de paz, de hasta 75.000 cascos azules, que será organizada por mandato de la ONU y bajo mando y control de la OTAN. El ministro de Defensa, Julián García Vargas, ha ánunciado que el batallón español podría ampliarse hasta unos 1.500 soldados con este fin, incluidos 200 miembros de la Infantería de Marina.
En caso de rechazo serbio, según González, habrá que adoptar "'medidas complementarias" de tipo militar, que se concretan en el bombardeo de las líneas de suministro desde la Federación Yugoslava hasta Bosnia o bien en la destrucción de las piezas de artillería de las milicias serbias, según las propuestas de Estados Unidos.
El Gobierno español no se ha pronunciado públicamente sobre una eventual participación de sus aviones en acciones ofensivas, pero el Ejército del Aire se prepara también para este supuesto, por si finalmente recibiera la, orden de participar. García Vargas ha limitado la oferta de los F- 18 al control aéreo, que autoriza el derribo de aviones que violen la prohibición de sobrevuelos. El ministro no ha descartado otras hipótesis, incluida la participación española en operaciones ofensivas, en conversaciones con sus colaboradores.
Un centenar de militares
Los F-18 son cazas polivalentes, aptos tanto para misiones de superioridad aérea, combate aire-aire, como para ataque a suelo. Para la primera cuentan con misiles Sidewinder y Sparrow, mientras que para la segunda pueden ir equipados con misiles antiradiación Harm, AGM-65 de guiado láser y Maverick, infrarrojo, así como unos 7.000 kilos de bombas.
Los seis F-18 seleccionados por el Ejército del Aire forman parte del escuadrón asignado al componente aéreo del Cuerpo de Reacción Rápida de la OTAN. Los cazas -de los que sólo cuatro operarían simultáneamente, mientras que los dos restantes permanecerían en reserva- se desplegarán en bases aéreas del norte de Italia, como Vilafranca o Istrana.
Para el traslado a Italia de la unidad habría que utilizar media decena de aviones Hércules C-130 de transporte, basados también en Zaragoza, y desplegar en la base desde la que vayan a operar un centenar de militares españoles, entre pilotos, mecánicos y personal de apoyo.
Los expertos consideran que la operación de control del espacio aéreo podría prolongarse durante varios años, por lo que el Ministerio de Defensa ha limitado a sólo seis aviones la oferta española. Un centenar de aviones de EE UU, Francia, Reino Unido y Holanda imponen actualmente la prohibición de sobrevolar Bosnia.
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