Guerra, forzado a aceptar a Yáñez por Sevilla

Las agrupaciones del PSOE de Sevilla obligaron ayer a incluir a Luis Yáñez de número tres en la lista al Congreso por esta provincia. El 62% de las 113 agrupaciones firmaron un escrito de protesta momentos antes de celebrarse ayer el comité provincial, órgano encargado de ratificar la candidatura propuesta por la ejecutiva.La mayoría de las asambleas se opusieron a eliminar a Yáñez, tal y como propuso el secretario del PSOE de Sevilla, Francisco Moreno, con el visto bueno de Alfonso Guerra, y del líder de los socialistas andaluces, Carlos Sanjuán.

Moreno mantuvo, horas antes del comité, negociaciones con dirigentes críticos con el fin de lograr un lista de consenso. Una vez formalizado el acuerdo, la ejecutiva permitió el acceso a la prensa a la reunión para escenificar el pacto.

El secretario provincial explicó ayer el cambio de ubicación de Yáñez en el tercer puesto en vez del segundo -ocupado por la portavoz en el Ayuntamiento de Sevilla, Amparo Rubiales-, en su decisión de dimitir como jefe de la oposición municipal tras el pacto entre PA-PP, que dejó a los socialistas sin alcaldía. La renuncia de Yáñez fue, pese al apoyo de las agrupaciones, cuestionada en las asambleas electorales.

En las negociaciones para elaborar la lista por Sevilla, que encabeza Alfonso Guerra, han participado el propio vicesecretario del PSOE, el presidente andaluz, Manuel Chaves, y Carlos Sanjuán. Éste, segun diversas fuentes, fue el que defendió con mayor virulencia la exclusión de Yáñez llamando a capítulo a dirigentes locales para que no lo apoyaran. Chaves, a la vista de cómo se estaba desarrollando el proceso, propuso que los puestos dos y tres del Congreso y otros dos del Senado fueran abiertos al comité federal y que el asunto se dirimiera entre González y Guerra.

Tras el acuerdo -la candidatura fue aprobada por unanimidad-, fuentes socialistas consideran "muy improbable" que el federal incluya a un independiente. La batalla de Sevilla, pues, acabó en tablas, al incluir al candidato de González, pero dejar fuera, presumiblemente, al independiente que aconsejó el secretario general del partido.