Carolina del Norte, Michigan, Kentucky y Kansas, en la fase final
Carolina del Norte y Michigan superaron parciales desfavorables para triunfar el pasado domingo y clasificarse junto a Kentucky y Kansas para la fase final del campeonato universitario norteamericano de baloncesto. Un torneo que comenzó con 64 pretendientes está por culminar en Nueva Orleans con cuatro grandes verdaderos. Las de Carolina del Norte, Kentucky y Kansas, por ese orden, son las universidades que más partidos han ganado en la historia y entre las tres suman nueve títulos y 31 participaciones en la final four mientras que la de Michigan, la campeona en 1989, tiene el mismo quinteto fabuloso que marcó un hito la semana pasada al llegar a ella como jugadores de primer año.
Carolina del Norte tuvo que superar una desventaja de 15 puntos en los comienzos de la primera mitad para derrotar a Cincinnati por 75-68, en la prórroga, en la final del Este. Por su parte, Michigan recuperó diez puntos de diferencia en la segunda para vencer a Temple por 77-72 en la del Oeste. En ambos casos, triunfó la clase y la categoría ante equipos con menos tradición, un hecho que sucede con poca frecuencia en las eliminatorias universitarias. Es la primera vez que tres cabezas de serie se clasifican para la fase final mientras que el cuarto, Kansas, es un número dos que se clasificó al eliminar al uno, Indiana, por 83-77 el sábado por la tarde.Las semifinales se disputarán el próximo sábado en el Superdome de Nueva Orleans, con cabida para 65.000 espectadores, con estos encuentros: Carolina del Norte (32 victorias y cuatro derrotas) frente a Kansas (29-6) y Kentucky (30-3) ante Michigan (30-4).
El primer partido es la secuela de otro que se celebró hace dos años, cuando Kansas, bajo la dirección de Roy Williams, derrotó a Carolina del Norte y Dean Smith, considerado el padrino del baloncesto universitario y el hombre que dio el primer empleo de ayudante a Williams. Ambos equipos tienen grandes jugadores, pero el encuentro se está vendiendo como un partido de ajedrez entre el maestro y el pupilo.
Michigan, con Steve Fisher y Kentucky, con Rick Pitino, son cuadros con entrenadores jóvenes en ascenso, pero en este caso predominan las estrellas en la cancha: el alero Chris Webber, de Michigan, y el alero Jamal Mashburn, de Kentucky. Estos conjuntos prefieren el juego rápido y electrizante con triples y jugadas de fantasía.
Este año no hay pronóstico que valga. Kentucky, que tiene cinco títulos en su historia, es un equipo con 15 victorias consecutivas. Pero Michigan regresa con el objetivo de cumplir con el triunfo que se le escapó el año pasado frente a Duke. Kansas ganó en 1988 y posee dos títulos en su palmarés, el mismo número que Carolina del Norte. Pero para Dean Smith es su novena final four. El domingo, después de su victoria ante Cincinnati, no dejó que sus muchachos recortaran la malla como es habitual, ya que quería reservar la ceremonia para después de la final universitaria. Esa es la tradición de los grandes.
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