Jose Luis Turina, entre Schönberg y Beethoven

Orquesta y Coros Nacionales

Director: Aldo Ceceato. Solista: G. Woolf, recitador. Obras de Turina, Schönberg y Beethoven. Auditorio Nacional. Madrid, 26 de marzo.

Schönberg y Beethoven se dieron una vez más la mano en el ciclo de la Orquesta Nacional de España (ONE) que Ceccato dedica a las dos escuelas de Viena. En este caso, el renovador dodecafonista aparecía con una obra menor, mientras el renovador del clasicismo vienés sonaba en una de sus páginas maestras como es la Sinfonía en do menor.

Fue excelente la versión de la Quinta por antonomasia, pues Aldo Ceccato hizo gala de un pensamiento musical fuerte, elevado, y de un germanismo estudiado y vivido durante sus largos años en Alemania. De tal manera, la obra nos llegó como una invención en bloque y sin que la separación entre los tiempos supusiera otra cosa que un respiro momentáneo que no rompe la continuidad de esas formidables "variaciones implícitas" a las que hace referencia André Boucourechliev. Los profesores de la ONE trabajaron con entrega y sirvieron al maestro sobre todo en la concepción general, el ángulo desde el que Ceccato construye el mensaje de Beethoven.

Durante sus años de exilio en América (1936-1951) compuso Schönberg en 1938 y por encargo de un rabino de Los Ángeles Kol Midre. Con el recitador Gabriel Woolf, la Orquesta y Coros Nacionales lograron una exposición expresiva, entre ritual y dramática.

José Luis Turina gusta de cultivar el género de las variaciones (en este caso explícitas), pues hasta la fecha nos ha dado unas sobre Scarlatti (1985) para grupo instrumental, otras sobre Prokófiev (1986) para fagot y piano, un concierto en forma de Variaciones y desavenencias sobre temas de Bocherini para clave y orquesta (1988), y en 1989, las denominadas Fantasía sobre una fantasía de Mudarra. Es un trabajo inteligente e inspirado, pues el saber adquiere trascendencia cuan do obedece al impulso indefinible de una inventiva personal.