Los mercados consideran insuficiente la bajada selectiva de los tipos de interés por el Bundesbank
El Bundesbank (el banco central alemán) bajó ayer en medio punto el tipo de descuento, que se sitúa ahora en un 7,5%, pero mantuvo inalterado el Lombardo, que se aplica a los bancos comerciales para préstamos de emergencia, que se mantiene en un 9%. La esperada medida decepcionó tanto a los mercados financieros como a los empresarios alemanes, aunque los expertos bancarios se apresuraran a calificarla de la única posible, apuntando a que una bajada mayor hubiera propiciado un ataque contra el marco dentro del Sistema Monetario Europeo (SME). La breve nota hecha pública tras la reunión del Consejo Directivo indicaba que la medida continuaba su "política de cortes graduales en los tipos".
La bajada del tope inferior de la franja en la que se mueve el precio del dinero a corto plazo, indican algunos economistas, no hace más que restablecer una cierta ortodoxia en los tipos, por lo que la medida de ayer cabría calificarla más de simbólica que de real. Desde que el Buba bajara, hace dos semanas, el precio de los llamados repos (tipos en el interbancario) a un 8,25%, se creó una situación un tanto extraordinaria, por cuanto lo normal es que los repos se hallen mucho más cerca del Lombardo -que representa el tope máximo- que del descuento. La normalidad, añaden los expertos, ha quedado hasta cierto punto restablecida, lo que no significa que se haya producido una real baja del precio del dinero. Otros expertos, sin embargo, consideran que cuando los tipos tienden a la baja, el Lombardo pierde mucha de su importancia, por lo que sí cabe hablar de una auténtica bajada del precio del dinero.En cualquier caso, lo menos que puede decirse es que la decisión tomada ayer por las autoridades monetarias de Francfort fue recibida con disparidad de opiniones. El Gobierno de Bonn, que insiste en capitalizar el acuerdo sobre el Pacto de Solidaridad conseguido el pasado fin de semana, y atribuirse una parte del éxito que supone este ligero descenso de los tipos, no tardó en lanzar las campanas al vuelo tan pronto llegó la noticia de Francfort, calificándola, por boca del ministro de Hacienda, el socialcristiano Theo Waigel, "de un estímulo positivo para el crecimiento económico, en una situación económica muy difícil".
Los descontentos
Pero los empresarios alemanes no compartieron su optimismo. La más importante organización de la patronal, la federación de Cámaras de Comercio e Industria (DIHT), calificó la bajada de "esencialmente simbólica" y dejó claras sus grandes dudas de que la medida "pudiera tener algún efecto en la economía alemana". Los sindicatos fueron aun más tajantes. La DAG aseguró que llegaba "demasiado tarde" y que era "demasiado poco". En la bolsa de Francfort, por otra parte, se produjo una considerable decepción, aunque al final de la jornada el índice general subiera ligeramente. El índice DAX-30 cerró en 1,696,19, lo supone una subida de 11,11 puntos.
Los grandes bancos parecieron entender mejor la medida y sus razones. "No se podía esperar del Bundesbank que hiciera más de lo que ha hecho a causa del temor sobre los efectos que pudiera tener una mayor bajada en el valor del marco en los mercados monetario?, dijo Ulrich Beckmann, principal economista del Deutsche Bank, el primer banco alemán. El marco se revaluó con respecto al franco y también contra el dolar. La bajada, aseguran otros economistas, está más relacionada con la asunción por la dirección del Bundesbank del hecho de que la economía alemana atraviesa una profunda recesión, que con que se dieran las condiciones idóneas a nivel monetario. La inflación se mantiene por encima del 4% y las perspectivas de futuro son de un mayor aumento de los déficit públicos.
El último descenso de los tipos tuvo lugar el pasado 4 de febrero y la mayoría de los observadores consideran que habrá que esperar bastante antes de que bajen de nuevo, aunque la tendencia general sea a la baja. En este sentido, añaden, hay que entender la estrategia actual del Bundesbank, que ha decidido optar por ir creando, poco a poco, las condiciones para pequeñas bajadas con medidas menores. Estas fuentes sitúan la próxima bajada de los tipos de referencia hacia finales de abril, aunque vendrá precedida por operaciones a la baja en el mercado diario de capitales, más concretamente con los repos. Para entonces, sin embargo, la recesión puede ser ya mucho más profunda, añaden los más pesimistas, concretamente los empresarios.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.