Barrionuevo critica a Solchaga y advierte que el PSOE no modificará en el Senado la ley de huelga
José Barrionuevo, ex ministro socialista y ponente de la ley de huelga en el Congreso, desautorizó ayer al ministro de Economía, Carlos Solchaga, por sus declaraciones favorables a modificar el texto pactado entre el PSOE y los sindicatos. Barrionuevo rechazó que el Senado vaya a admitir cambios sustanciales al proyecto de ley que se aprobó en el Congreso el jueves. Y subrayó que "el PSOE es leal a lo que ha pactado, lo ha demostrado y lo va a seguir demostrando". Sin embargo, el presidente del Senado, Juan José Laborda, advertía casi simultáneamente su intención de ampliar el plazo para la presentación de enmiendas para dar cabida a las propuestas empresariales, lo que recoge el deseo de Solchaga.
El diputado socialista José Barrionuevo sostuvo ayer en Madrid que del pacto entre el PSOE y las centrales sindicales "ha surgido un proyecto de ley que es bueno per se", contrariamente a la opinión que expresó el viernes en Burgos el titular de Economía, Carlos Solchaga, quien se solidarizó con las quejas de la CEOE. La patronal alega que el texto consensuado entre el partido socialista y los sindicatos excluye los intereses de los empresarios."Las declaraciones del ministro de Economía o son una equivocación o son una obviedad", afirmó, a preguntas de los periodistas, el ex ministro Barrionuevo en el seminario El proyecto de ley de huelga en el contexto del futuro mercado laboral, organizado por el Club Diálogos para la Democracia y el diario Cinco Días.
Barrionuevo -en presencia de los secretarios de acción sindical de UGT y CC OO, Apolinar Rodríguez y Agustín Moreno- aseguró que el PSOE "ya se reunió con una representación de la patronal" durante el otoño "para exponerle cómo estaban las negociaciones". Posteriormente, añadió, "la CEOE presentó sus propuestas al grupo socialista" y éste replicó que "no podía asumir ninguna de ellas porque están en contra de lo que piensa el PSOE".
Cercanía sindical
El ministro de Trabajo, Luis Martínez Noval, aseguró a los periodistas -poco antes de clausurar el seminario- que "el Grupo Parlamentario Socialista suele respetar los acuerdos a los que llega". Pero este respeto no impide, a su juicio, que se produzcan modificaciones en el Senado, "si así lo deciden los grupos parlamentarios". Añadió que sería bueno ampliar el consenso, aunque puntualizó que "el grupo socialista sólo consiguió alcanzarlo con las centrales sindicales". Noval considera que, aún así, el acuerdo es positivo "por el cambio de comportamiento que se derivará de la cercanía de los sindicatos al proyecto".
El titular de Trabajo intentó restar importancia a las polémicas declaraciones de Carlos Solchaga. "Lo que el ministro de Economía ha dicho es lo mismo que mantengo yo, que el Senado pude hacer modificaciones", subrayó. Pero puntualizó: "No puedo decir en qué sentido, pues eso sería tanto como condicionar la posición del grupo parlamentario".
Horas antes, Barrionuevo había dicho -en referencia a Solchaga- que "los senadores son políticamente solventes, y no actúan a ningún toque de silbato".
[Frente a las declaraciones de Barrionuevo, el presidente del Senado, Juan José Laborda, anunció ayer en Burgos su predisposición a incluir las enmiendas sugeridas por los empresarios. En una rueda de prensa, Laborda dijo: "En la medida en que esté en mis manos, ayudaré a ampliar el plazo de presentación de enmiendas para ampliar aún más el consenso que ya trae la ley. Yo creo que los sindicatos están en esa misma disposición, porqué ellos no hubieran aceptado una ley de huelga pactada entre Gobierno y empresarios. Los sindicatos deben comprender que si los empresarios se sumaran al consenso, esta ley ofrecerería más garantías jurídicas"].
Pero los representantes de las centrales mayoritarias no coinciden, en absoluto, con esta opinión del presidente del Senado, y en cambio, subrayan la tesis de Barrionuevo. En el mismo foro que el ex ministro, Agustín Moreno destacó que "la huelga es un derecho de los trabajadores", por lo que "la negociación para regularla corresponde a los sindicatos, al Gobierno y a los grupos parlamentarios". Y sentenció: "Un cambio en el texto rompería todo el crédito para la negociación social".
Su homólogo en UGT, Apolinar Rodríguez, añadió que "desde el PSOE no se va a generar una dinámica de cambio del proyecto". Por ello, dijo, "si surge, sería impuesta desde fuera y eso equivaldría a una fractura del PSOE". Ambos reiteraron sus habituales críticas al titular de Economía.
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