Señor Arzalluz

Después de haber escuchado sus aclaraciones en un programa de Radio Nacional aún me quedan algunas dudas que quisiera resolver antes de las elecciones.Yo no soy vasco, pero tengo Rh negativo, no sé si "a la vasca", y mi cerebro tiene una forma peculiar distinta a los que me rodean. Sé por documentos fehacientes que la zona en que he nacido le fue ganada al moro y repoblada por ejércitos en el que abundaban los apellidos vascos: de hecho, tengo un primo que se apellida Velasco, que como usted bien sabe es un vocablo que procede de su idioma.

Mi pregunta es: en caso de que tanto medidas como análisis de sangre dieran positivo (en lo que a vasquismo se refiere), ¿podré presentarme como senador por su partido? De mi gusto sería si antes me resolviese algunas dudas.

Si usted, como afirmó, tiene que hablar sólo de política y no de otro tipo de valores humanitarios, dígame: ¿qué peculiaridades político-biológicas se deducen de nuestra estructura cerebral? ¿Se establecerán las autonomías futuras en base a la forma del cerebro? ¿Qué hará con aquellos nacidos en Euskadi cuyo análisis de sangre dé Rh positivo? ¿Transfusiones? ¿Se tendrán que someter a una trepanación cerebral aquellos nacidos en el País Vasco que no se ajusten a las medidas?

¿Qué peculiaridades políticas se deducen de que un pueblo haya practicado más la endogamia? ¿Una lengua es menos respetable porque provenga de evolución y contactos con otras? Dada la hipotética relación entre lengua y pensamiento, ¿está relacionado el arcaísmo lingüístico con el arcaísmo mental?

Y si, como, por otro lado, todo esto no tiene consecuencias políticas, ¿no estaba usted haciendo intrusismo profesional, quitando el pan a los pobres antropólogos? Dígame que no, por favor. ¿Hay relación entre un refrito de antropólogos y una ración de antropólogos al horno? ¿No es un plato demasiado fuerte esta enorme empanada mental?-