Aznar dice a los jubilados que el aumento del paro hace peligrar las pensiones

José María Aznar reemprendió ayer en Palma de Mallorca la campaña preelectoral, tras el paréntesis del congreso en el que fue proclamado candidato a la Jefatura del Gobierno, en un encuentro con 2.000 jubilados y pensionistas pertenecientes a 120 asociaciones de la tercera edad de las islas Baleares. Aznar dejó claro que no va a conceder ventaja a ningún rival hasta las elecciones y que se considera tan preparado para competir por La Moncloa como su actual ocupante.

Antes se reunirse con los jubilados, Aznar, en una conferencia de prensa, interpretó en tono irónico el viaje de Felipe González a la, India como la satisfacción de un deseo "antes de abandonar" la Jefatura del Gobierno, y le acusó de haber silenciado en su visita a China la represión de los derechos humanos en aquel país. Aznar admitió que quien ocupa la Moncloa debe viajar y no permanecer aislado en la Jefatura del Gobierno, pero acudiendo "a la India, a Pekín y a Albacete".El mensaje que dirigió unas horas más tarde a los jubilados se resume en pocas palabras: el único riesgo para el cobro de sus pensiones en España procede del aumento del desempleo, que puede llevar la Seguridad Social a la quiebra.

Aznar participó en una comida a la que habían sido invitados, en un restaurante cerca de Palma, 2.000 jubilados y pensionistas. Empleó una hora en Saludar uno por uno a los presentes, besar a las mujeres estrechar la mano de los hombres, que le acogieron con bien venidas y expresiones de ánimo y de entusiasmo.Vino gasificado y cava

En su periplo grupo por grupo del inmenso comedor llegó a gatear sobre alguna mesa para alcanzar una mano tendida. Los invitados y el candidato del PP consumieron el mismo menú: arroz a la marinera, pollo asado y ensaimada mallorquina con helado, aunque al final a todos se les sirvió un vino gasificado, menos en la mesa de Aznar y sus acompañantes, que degustaron cava catalán.

Aznar pidió a los jubilados y pensionistas que no tengan miedo y que no se dejen asustar sobre el futuro de sus percepciones económicas. "Las pensiones ni las paga Felipe González ni las pagaré yo. Son un derecho, porque se ha cotizado. No las regala nadie", aseguró.

Para el candidato del PP las pensiones y los servicios a los jubilados representan un pacto de solidaridad entre generaciones, y de ahí puede venir el peligro en el futuro. "Se pierden cada día en España 2.000 puestos de trabajo. Si cada vez trabaja menos gente, ahí puede haber un riesgo" por la quiebra de la Seguridad Social. "Pero yo no me resigno a una España con tres millones de parados".Aznar, que aludió a su padre como a un jubilado de 76 años, explicó también las propuestas del partido en torno a la edad de jubilación, entre muestras de asentimiento entre el auditorio. En España río existe un edad obligatoria de jubilación, salvo en la función pública, y el PP no quiere adelantarla ni retrasarla, señaló.Por la mañana, el líder del PP, acompañado del presidente del Gobierno balear, Gabriel Cañellas, visitó un centro de mayores en Palma de Mallorca. Sonrió, estrechó manos, bromeó, agradeció los presentes y animó a los socios del centro a seguir con sus actividades. Luego mantuvo una reunión con presidentes de asociaciones de mayores de las islas para escuchar sus problemas.Salario mínimo

El PP pretende elevar hasta el salario mínimo las pensiones que aún se sitúan por debajo (más del 70%, según sus cálculos) y mantener la capacidad adquisitiva de las restantes, según explicó el candidato en una. conferencia de prensa a primera hora de la mañana.

Aznar resaltó la unidad de su formación política frente a un partido socialista "dividido en 100 camarillas y cuyo único proyecto es conservar el poder," y rechazó cualquier paralelismo entre el caso de presunto intento de soborno en Calvià, que anteayer quedó visto para sentencia, y los casos de corrupción atribuidos al PSOE. "En Calvià", según Aznar, "se ha llamado a declarar a unas personas a las que se hacen acusaciones. No tiene nada que ver, ¿eh?".

[Por. otro lado, el presidente del PP en Extremadura, Luis Ramallo, renunciará a este cargo en la próxima junta regional de su partido, en aplicación de la norma aprobada en el congreso del PP que declara incompatibles los escaños en el Congreso y los cargos regionales del partido, informa Servimedia.]