El teólogo disidente Haering apoya la nueva doctrina intervencionista del Papa
Benrad Hearing, teólogo de una nueva moral relativamente aperturista en temas como el aborto y la eutanasia, que ha entrado frecuentemente en conflicto con la Iglesia oficial por ese motivo, expresó ayer en Roma su apoyo a la nueva doctrina de la "injerencia humanitaria" ya expuesta por Juan Pablo II en dos ocasiones para justificar intervenciones internacionales como la recientemente concluida en Somalia o la que el propio Papa promueve en Bosnia.
"Esperemos", dijo el ya anciano teólogo, "que en Bosnia se alcance un armisticio y que no sea necesario intervenir. Pero si la guerra continuara, entrar con una fuerza militar bien organizada y sólo para desarmar, como se ha hecho en Somalia, representaría ese mínimo de violencia que Gandhi aceptaba".
El coste en vidas humanas sería limitado. Debería ser claro que no se va para hacer la guerra a Serbia, pues estamos absolutamente interesados en la reconciliación y no queremos la supresión de una parte", añadió Hearing.
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