¿Desastre demográfico?

Hace tiempo que todos reconocemos que para sanear nuestras empresas hay que disminuir su personal, discutiendo sólo los modos de realizarlo. La población española, desde que ha tenido los medios, está disminuyendo la real catástrofe demográfica que, ahora que han llegado al mercado de trabajo y consumo, suponen los 10 millones más de españoles nacidos entre 1955 y 1976. Fue un regalo envenenado del tardofranquismo, que hoy pagamos en hacinamiento, desempleo, conflictos sociales y problemas ecológicos.Pero ahora salen unos funcionarios del Instituto Nacional de Estadística, reliquias del poblacionismo autoritario del antiguo régimen, y denuncian el pretendido desastre demográfico que sería aliviar ese exceso de población, si continuara durante 50 años (¡lo que reconocen por otro lado que no sucederá!) el actual descenso de la natalidad. iComo si la catástrofe no estuviera ya aquí, y por exceso de población!

.En su ceguera ideológica, que convierte ilegítimamente un organismo administrativo en una tribuna partidista, y que tanto daño nos hace, pretenden incluso aumentar la inmigración, cuando el racismo que nos invade y avergüenza se explica, que no se justifica, sobre todo por la

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