Los protagonistas de la trama

Éstas son algunas de las personas que aparecen citadas con mayor frecuencia en la investigación judicial puesta en marcha por Baltasar Garzón sobre irregularidades en la unidad de la Guardia Civil encargada de la lucha contra el narcotráfico.Mandos de la Guardia Civil:

- Coronel Arsenio Ayuso. Máximo responsable de la unidad desde 1987 hasta su retiro, en agosto de 1990. Se le cita en diversas ocasiones como autorizador de pagos con droga a confidentes, con los que, según algunos testimonios, mantiene incluso reuniones personales. En la actualidad es asesor del director general de la Guardia Civil, Luis Roldán.

- Coronel Rafael Garabito Gómez. Sustituye a Ayuso al mando de la UCIFA, hasta que, a mediados de diciembre, es destituido al estallar el escándalo. Según los testimonios recogidos en el sumario, durante su mandato continúan los pagos con drogas a confidentes y es cuando se realizan la mayor parte de las llamadas entregas controladas de droga, que suponen, en la práctica, la entrada en España de estupefacientes para desarticular redes de traficantes asentadas en España.

- Teniente coronel Francisco Quintero Sanjuán. Vinculado al Servicio Fiscal de la Guardia Civil desde enero de 1982. En el interrogatorio al que le somete el juez Garzón admite que, al menos en dos ocasiones, autorizó el pago con drogas a confidentes que habían alertado sobre operaciones. Se le vincula también con la detención de dos guardias de Pamplona a los que se les fabricaron pruebas falsas.

- Comandante José Ramón Pindado Martínez. Es el mando de la Guardia Civil que mantiene un contacto más estrecho con el confidente Ramón de Temple. A Pindado se le vincula con la entrada en España de alijos de cocaína dentro de lo que se denomina entregas vigiladas, y con el consiguiente pago de premios al confidente que las hace posible. Los resultados de las operaciones son negativos.

- Capitán Jesús Narciso Nuñez Calvo. Se incorpora a la UCIFA en marzo de 1991 por petición directa de Pindado y para cubrir una vacante que, según su propio testimonio, la oficialidad de la Guardia Civil se mostraba remisa a solicitar. Participa en las entregas vigiladas organizadas por Pindado y en su declaración ante Garzón afirma que se ha sentido engañado por sus mandos.

Los 'arrepentidos'

- Doroteo Gómez Porras. Vinculado a la jefatura del Servicio Fiscal desde junio de 1987. Diversos testimonios recogidos en el sumario le señalan como uno de los "hombres de confianza" de Pindado durante el periodo en el que éste es comandante en la UCIFA. Aparece relacionado con las principales operaciones de pago con drogas a confidentes. Su testimonio es el que aporta más datos sobre las presuntas irregularidades cometidas.

- Vicente Domínguez Serrano. Investigado ya por la Audiencia Nacional en 1990, el guardia había denunciado prácticas irregulares en el seno de la UCIFA y el pago con droga a confidentes. Los responsables de la unidad lo negaron y acusaron al guardia de quedarse con drogas.

Los confidentes

- Ramón María de Temple Llopis. Colabora con la Guardia Civil tras su regreso a España en julio de 1990, tras haber permanecido algún tiempo huido en Suramérica. Según los testimonios recogidos en el sumario, Ramón María de Temple tiene una participación decisiva en las operaciones. de traída a España de cocaína, presuntamente organizadas con el apoyo del comandante Pindado. Obtiene por ello diversas cantidades de droga. El dinero obtenido con la venta de algunas de estas partidas se reparte entre algunos guardias.

- 'Los Dalton'. José Luis Recuero y José Manuel García Gutiérrez, conocidos como Los hermanos Dalton. Personajes clave dentro de la investigación iniciada por Garzón. José Luis Recuero relata que la operación de los 32 kilos intervenidos en Lloret de Mar en mayo de 1990 se gestó desde el propio despacho del coronel Arsenio Ayuso, entonces máximo responsable del servicio antidroga de la Guardia Civil. Cuando, en diciembre de 1990, Los Dalton subieron al apartamento de la calle de Agustín de Foxá donde se requisaron 93 kilos de cocaína, las maletas estaban abiertas y Gómez Porras había apartado cinco paquetes de droga. Pasadas las navidades, asegura Recuero, Pindado les citó en la UCIFA. Un sargento y el comandante les dieron tres kilos de cocaína en la escalera del tercio de la Dirección General de la Guardia Civil.