Estados Unidos y la CE reiteran por escrito su compromiso de acelerar el acuerdo del GATT

El primer mínistro británico, John Major, como presidente de tamo de la CE, y el presidente de EE UU, George Bush, enviaron ayer un comunicado conjunto a la ejecutiva del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT) en el que ratifican su deseo de cerrar las negociaciones sobre la Ronda Uruguay antes de mediados de enero. El escrito lleva el aval del presidente de la Comisión Europea, el francés Jacques Delors. Francia, que está en contra de este compromiso, insistía ayer en que no dará por. válido el polémico pacto agrícola entre la Comunidad Europea y Estados Unidos.

El viernes pasado, Bush, Major y Jaques Delors anunciaron públicamente en Washington que habían llegado a un acuerdo para acelerar las negociaciones del GATT y firmar un acuerdo global a mediados de enero. Ayer oficializaron su compromiso enviando al director general del GATT, Arthur Dunkel, un escrito que ratifica sus intenciones. Dunkel se había fijado el reto político de cerrar el acuerdo antes de que acabara este año, pero arrojó la toalla la semana pasada al comunicarle los negociadores franceses su intención de no suscribir ningún pacto antes de marzo. Para entonces se habrán celebrado ya las elecciones generales en Francia.Los observadores políticos de Ginebra (sede del GATT) ven con escepticismo el acuerdo entre Bush y Major, ya que lo relacionan directamente con el abandono de la presidencia norteamericana por parte de George Bush el próximo 20 de enero. La llegada de Bill Clinton, opinan, reduciría la posibilidad de que la nueva Administración alcance pronto un acuerdo comercial con los socios del GATT, en general, y de la CE, en particular.

Este pretendido acelerón de las negociaciones querría aprovechar la reunión que el próximo 15 de enero celebrará en Ginebra el consejo de la Ronda Uruguay. Si para entonces Bush y Major cumplen su objetivo, el polémico acuerdo agrícola entre la CE y EE UU será puesto sobre la mesa, junto a otras muchas cuestiones. Este acuerdo, aunque ratificado por la Comisión Europea, cuenta con la oposición frontal de Francia.

Los propios socios del GATT han reaccionado con suma cautela al anuncio de esta nueva fecha límite. A su juicio, es prácticamente imposible llegar en enero a un acuerdo global, aunque sólo sea porque la mayoría de los negociadores no vuelven de sus vacaciones hasta mediados de enero.

"El mensaje de Washington no lo debemos sobrevalorar. Desde aquí se ve como un mensaje de dos presidentes salientes", declaró un negociador comunitario. Además de George Bush, John Major pierde su presidencia de turno de la CE a partir del 31 de diciembre.

"En teoría es posible alcanzar un acuerdo antes de que Clinton tome posesión de su cargo. Tenemos tres días con sus noches laborables a partir del 15 de enero. Pero, sinceramente, no creo que suceda", dijo la misma fuente.

El Gobierno francés podría bloquear cualquier acuerdo antes de sus elecciones generales, el próximo 2 de marzo. Respaldando esta idea, ayer, una vez más, Francia atacó duramente la actuación de la Comisión Europea en las negociaciones mantenidas en Washington. Roland Dumas, ministro de Exteriores, calificó en Bruselas de "error trágico" la conclusión del acuerdo con Estados Unidos sobre agricultura. Dumas, que asegura tener el respaldo de Portugal, Irlanda, Italia y Grecia, considera "una infracción" al mandato del Consejo de Ministros la renegociación de cifras incluidas en la Política Agraria Común. El comisario europeo de Asuntos Exteriores, Frans Andriessen, uno de los artífices del acuerdo, replicó a Dumas diciendo que no tiene la sensación de haber violado su mandato.