Eligio Hernández asegura que se le instrumentaliza en la lucha política
El fiscal general del Estado, Eligio Hernández, declaró ayer en Sevilla que "están utilizando al Ministerio Fiscal como instrumento de lucha política". "Parece existir fuera del poder judicial un interés partidista en mostrar al fiscal general del Estado como un abogado, defensor de algún partido político", añadió. Éste fue uno de los argumentos esgrimidos por Hernández ante la petición de dimisión formulada ayer por el Congreso de la Asociación de Fiscales, en apoyo de una iniciativa similar tomada por la Comisión Ejecutiva del cuerpo el pasado 3 de julio.Eligio Hernández aseguró que se ha atenido "escrupulosamente a las garantías de imparcialidad y a la autonomía funcional" en el ejercicio de su cargo, especialmente en los procesos con relevancia política, y que es un "diagnóstico exagerado" atribuir a su mandato las causas del "supuesto deterioro" del ministerio público que se han manifestado en el Congreso.
Acto seguido exhortó, a los fiscales que hayan sentido comprometida su independencia por directrices o indicaciones suyas, a que lo digan en público. "Si nadie hasta ahora lo ha dicho, ¿por qué se sigue diciendo que falto a la imparcialidad", apostilló.
No obstante, consideró que la petición de dimisión y las críticas contra el actual modelo de su cargo desde la Asociación de Fiscales son "discrepancias legítimas". "No sería demócrata si me ofendiera porque se pidiera mi dimisión" dijo, "tengo que meditar sobre la propuesta, pero si se atendieran a esas peticiones sería difícil que existiese un fiscal general del Estado, porque a los dos últimos fiscales también se les pidió el cese".
Excluir a los políticos
El grueso de las conclusiones aprobadas por la asociación tienen como blanco la figura del fiscal general. Entre otras cuestiones, el Congreso ha propuesto que el cargo se desempeñe en virtud de un mandato temporal e irrevocable, y que se excluyan a quienes hayan participado anteriormente en la política activa, en un tiempo prudencialmente fijado. Eligio Hernández discrepó de esta moción contestando que se siente orgulloso de haberse dedicado a la política, cosa que hizo como "un deber patriótico y ciudadano". Hernández mostró también su "absoluta conformidad" con el actual Estatuto regulador del cuerpo.Sobre las relaciones del ministerio público con el Ejecutivo, el fiscal general manifestó la conveniencia de mantener "unas relaciones inteligentes y un clima de confianza" y negó "rotundamente" que haya recibido ninguna presión ni recomendación por parte de ningún poder público del grupo político.
Eligio Hernández declaró que incluir en las órdenes que imparte el razonamiento que las ha motivado es algo "secundario", aunque mostró su disposición a considerar esta petición de los fiscales, que consideran agredida su "dignidad" con este estilo "castrense" de ordenar.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.